Cañicultores de Sandoná al borde de la ruina

Los cañicultores de Sandoná están al borde de
la ruina por los bajos precios de la panela que en las últimas semanas han
estado entre 18 mil y 20 mil pesos la paca de 22 kilos (entre 818 y 909 pesos
por kilo).

Así lo informó el dirigente panelero Severiano
Salas Meneses quien manifestó que una de las principales causas para llegar a
esta situación es la superproducción de panela en el país, derivada de un
aumento considerable del área sembrada de caña panelera.

Señaló que en el departamento de Nariño en la
actualidad se menciona a 22 municipios paneleros, cuando hace unos 10 años eran
9 y 20 años atrás únicamente cinco municipios estaban dedicados a la producción
de panela, Sandoná, Consacá, Ancuya, Linares y Samaniego.

De otro lado ha disminuido el consumo de
panela a nivel nacional de 29 kilos per cápita por año se bajó a 25 kilos por persona y
por año, lo que significa que hay una excesiva oferta y muy poca demanda del
producto alimenticio.

Explicó que en los últimos dos años los
precios en Sandoná estuvieron por encima de 30 mil pesos, por lo cual los
cañicultores reinvirtieron sus utilidades en la fertilización de sus predios de
caña panelera lo que trajo consigo un aumento considerable en la producción.

Así mismo en el último año se aumentó entre el
20 y el 30 por ciento la mano de obra en la producción de la panela, porque
varios trabajadores de Sandoná tuvieron la oportunidad de ir a trabajar a otros
municipios como Cumbitara en donde les pagan mejores salarios que en esta
localidad.

Salas Meneses expresó que una hectárea de caña
puede dar una semana de molienda, aproximadamente unas 450 pacas, con unos
ingresos totales de 9 millones de pesos (a 20 mil pesos la paca) y en la obra
para procesarla se gastan 7 millones de pesos, por lo cual queda una utilidad
de 2 millones de pesos, que no compensan los costos de producción de esa
hectárea, de segundo corte en adelante, que está en 3 millones de pesos
aproximadamente, dejándole pérdidas de un millón de pesos al cañicultor por cada hectárea.

La situación es tan dramática que varios
cañicultores no saben qué hace en la actualidad, si conseguir trapiche para
molerla o esperar que mejoren los precios en este mes de octubre cuando
comienzan las cosechas de café en el eje cafetero y Antioquia, que permitiría el
mejoramiento del precio del dulce producto.

Anticipó que si la situación continúa como
está, las 30 empresas paneleras que están moliendo en la actualidad podrían
parar y se generaría un problema social porque unos 1.200 trabajadores
quedarían cesantes.