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Diez mitos sobre nuestra independencia

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Ni los españoles eran tan esclavistas, ni
Bolívar tan progresista.
Por José Alvárez Carreño
www.las2orillas.co
1. “La Independencia se dio en 1810 por
influencia de los ideales de libertad pregonados por la Revolución Francesa”:
Falso, en ese momento la península española
estaba casi en su totalidad invadida por tropas francesas y los criollos
(descendientes de los españoles que hicieron la conquista) se sublevan
precisamente para seguir siendo fieles a Fernando VII
quien en ese momento era
prisionero de Bonaparte. Esas revueltas se dan ante el miedo de que esos
ideales de libertad pregonados por los franceses contagiara a las autoridades
virreinales y terminaran aboliendo el negocio de la esclavitud, a través de los
cuales los criollos mantenían sus fortunas.

2. “Los Españoles se robaban la plata y el oro
y por eso se dio la independencia”:
Colombia nunca fue ni ha sido productor de
plata, ni antes de la conquista, ni durante la colonia o posteriormente, y la
producción de oro comparada con la de Perú o México, fue mínima. En todo caso,
los españoles que embarcaban para América, nunca regresaban a sus tierras, se
quedaron y son los antepasados (junto con los indígenas) de los actuales
colombianos, mexicanos, venezolanos, etc. Entre los españoles que durante el
periodo colonial llegaron a América, había personas ricas o que se
enriquecieron durante la conquista, cuyos descendientes siguieron siendo ricos
después de la independencia y aún siguen siéndolo
, ocupando los puestos de
poder en los actuales países americanos; también había españoles pobres, que
siguieron siendo pobres y que –a diferencia de colonias como las inglesas donde
exterminaron a los nativos- se mezclaron con indígenas, siendo los antepasados
de la mayoría de colombianos. Los recursos fueron saqueados por ancestros de
las castas políticas que aún hoy están en el poder.
3. “Con la independencia se obtuvo la
libertad”:
Es común que en las escuelas enseñen que “la
libertad de Colombia se alcanzó el 20 de julio de 1810”. No obstante, si bien
la independencia se dio desde 1810, y se reafirma en 1821 con la Constitución
de Cúcuta, la cual mantuvo la vergonzosa institución de la esclavitud
. Mientras
para la fecha, en la península española la esclavitud ya se había acabado de
facto y jurídicamente se haría casi dos décadas antes que en lo que hoy es
Colombia (allí en 1837, en Colombia hasta en 1851). En Colombia solo se pudo
abolir la esclavitud luego de vencer la resistencia férrea de esclavistas como
Julio Arboleda y su hermano Sergio Arboleda, siendo necesario que el Estado
“compensara” con astronómicas sumas monetarias a los terratenientes
propietarios de esclavos. Lo que sí es verdad, es que la mayoría de esos
defensores de la esclavitud fueron militares destacados del “ejército
patriota”.
4. “Los Indígenas derrotaron a los españoles”:
Si bien en las tropas de Bolívar pudiera haber
algunos indígenas, la lucha que se dio entre 1810 y 1821 fue muy distinta a la
que dieron durante la conquista los heróicos combatientes de La Gaitana, los
Laches, o los caribes
. Luego de 300 años de haberse incorporado los territorios
americanos a la corona española y ante los contantes abusos de los criollos, la
posición de la mayoría de indígenas fue muy diferente. Así, los territorios con
mayoría indígena como Pasto fueron los más difíciles de doblegar, a incluso
hasta 1823 seguían apareciendo guerrillas de nativos como la comandada por
Agustín Agualongo, quienes seguían reivindicando ser españoles y únicamente
reconocer a las autoridades peninsulares como las legítimas. Así mismo,
indígenas como el cacique de Mamatoco, quien fue oficial del ejército español a
las órdenes de Pablo Morillo. Entre tanto, más de la mitad de soldados que
combatieron al lado de Bolívar (se estiman unos 8.500) eran Ingleses y
mercenarios de diferentes países europeos enrolados en la Legión Británica a
cambio de una “paga”
que sería dada con cuantiosos empréstitos que adquirió el
naciente Estado de manos de los ingleses, naciendo así la República endeudada
hasta los tuétanos con sus “aliados”.
5. “Los indígenas eran esclavos de los
españoles”:
Decir que la conquista fue pacífica sería no
solo faltar a la verdad, sino también deshonrar la memoria de heroicos
combatientes como Cuauhtémoc en México, La Gaitana en Colombia o Atahualpa en
Perú. No obstante, durante la Colonia hubo una convivencia relativamente normal
entre indígenas y blancos. Así, a diferencia de las colonias inglesas o
francesas donde los indígenas no solo siguieron siendo exterminados sino que se
les aisló, en el imperio español los nativos se mezclaron con los peninsulares,
dando lugar al mestizaje que hoy caracteriza a la nación hispanoamericana
. Si
bien al principio existieron instituciones típicas del modo de producción
feudal como la mita y la encomienda, estas dejaron de existir mucho antes de la
independencia, ya que a la Corona le interesaba la protección de los nativos no
por un gesto humanitario, sino porque con su trabajo pagaban un impuesto
llamado “tributo de indios” el cual iba directo a las arcas del monarca a
cambio de protección ante el abuso de los criollos. Para 1810 eran aún
numerosos los pueblos de indios y los resguardos, los cuales misteriosamente
desaparecierían junto con sus habitantes unas décadas después ¿Qué pasó con
ellos?, es un interrogante sobre el cual la historia oficial aún no da una
respuesta
.
6. “Los indígenas eran tratados como
inferiores a los españoles”:
Las diferencias de clases son inherentes a la
existencia de la propiedad privada sobre los medios de producción. No obstante,
en 1811 la Constitución española promulgada en Cádiz ratificó en el artículo 5
y 18 que los indígenas eran también ciudadanos españoles, al igual que los
mestizos, los criollos, y en general “todos los hombres libres nacidos y
avecinados en los dominios de las Españas y los hijos de estos”. Después de que
se promulgó esa norma, los criollos deciden romper cualquier vínculo con la
península, y en pocos años las consecuencias eran visibles: Los indígenas
perdieron sus resguardos, pasando sus tierras a las castas criollas, como
también pasaron a su poder la mayoría de baldíos, los ejidos municipales etc
.
Esa situación llevó a que por ejemplo, los Muiscas que eran más del 60% de
población de la sabana de Bogotá para 1810, misteriosamente dejaran de existir
unos pocos años después, en tanto que la brecha entre los antiguos “criollos” y
los mestizos se fue haciendo cada vez mayor durante la formación y
consolidación de la nueva República.
7. “Bolívar luchó contra el imperialismo”:
Imperio no es sinónimo de imperialismo, pues
mientras imperio hace referencia a un dominio político que se ejerce sobre una
extensión territorial donde habita una diversidad de pueblos y ha existido
desde la antigüedad, imperialismo es un concepto económico que solo va a
aparecer a finales del siglo XIX y que se va a dar por el desarrollo de las
fuerzas productivas donde su actuar desborda las fronteras nacionales. Así,
“Imperialismo” es sinónimo de capitalismo monopolista, y este solo se dio
después de la crisis económica inglesa de 1871. Esa necesidad de abrir mercados
llevó entre otras cosas al reparto de África en 1885 y sería el germen de la
Primera Guerra Mundial hace 100 años
.
8. “A los españoles les interesaba mantener la
esclavitud”:
Falso, los menos interesados en que esa
institución se mantuviera eran los peninsulares, pues su incipiente industria
que empezaba a surgir especialmente en Cataluña y el País Vasco necesitaba mano
de obra y consumidores libres, que pudiera manejar dinero para que a la vez
pudieran ser compradores de sus productos. ¿Qué ganaba un campesino de Castilla
con que un terrateniente criollo del Cauca tuviera 200 esclavos en alguna de
sus haciendas?
9. “El humanismo de los independentistas
contrasta con el salvajismo de los españoles”:
Sin duda alguna, personajes como Pablo Morillo
cometieron actos crueles contra los sublevados independentistas. No obstante,
decir que las tropas independentistas fueron menos crueles es más que
descabellado. Así, declaraciones como la hecha en el “Decreto de Guerra a
Muerte” donde se amenaza con asesinar a la población peninsular que fuera
neutra, hoy sería más que una instigación al genocidio. Tampoco ha de olvidarse
que el reclutamiento infantil fue inaugurado por las tropas independentistas o
¿Qué explica que Pedro Pascasio Martínez, un niño de solo once años, hiciera
parte del ejército de Bolívar cuando capturó a Barreiro el 7 de agosto de 1819?
Igualmente ha de tenerse en cuenta hechos como los fusilamientos en Ventaquema
el 8 de agosto de los prisioneros capturados el día anterior en la Batalla del
Puente de Boyacá, o el acto más cruel de todos, la masacre de “La navidad
negra” en 1822 cuando entre el 22 de diciembre y el 26 del mismo mes, los
ejércitos independentistas asesinaron a cuchillo a miles de pastusos,
incluyendo mujeres y niños, por el único hecho de no haber secundado a los terratenientes
que se unieron al ejército de Bolívar
.
10. “Santander era de Derecha y Bolívar era de
Izquierda”:
Este mito se ha construido especialmente
durante la segunda mitad del siglo XX, a pesar de que hasta ese momento
Santander había sido considerado el precursor del liberalismo (izquierda en el
siglo XIX) y de que la imagen de Bolívar siguiera presidiendo cualquier acto
protocolario del Partido Conservador (Derecha). No obstante, si se analiza la
vida de los dos caudillos se puede ver grandes diferencias ideológicas a pesar
de que sus orígenes de clase sean los mismos: Familias de terratenientes
criollos, descendientes de españoles que hicieron fortuna en el nuevo mundo
.
Aun así, puede verse como Bolívar no solo encarnó una ideología de férreo centralismo,
como los plasmó en la Constitución Boliviana o en el Decreto Orgánico de la
Dictadura, sino que además, tuvo posiciones cuestionables como fue el
acercamiento excesivo a la corona inglesa y francesa, e incluso, según muchos
historiadores lo han planteado, el intento de buscar entre los Habsburgo –Casa
reinante en Austria y antigua familia que dominó España hasta la segunda mitad
del siglo XVIII- a un candidato para que viniera a reinar entre los nacientes
Estados Americanos.
En cuanto a Santander, durante la segunda
mitad del siglo XX se le ha hecho un juicio histórico y se le ha condenado con
análisis muy válidos para juzgar la historia del siglo XX, más no la del siglo
XIX: Ser librecambista y su proximidad con EEUU. Al respecto solo cabe preguntar
¿acaso no fueron los Estados Unidos durante finales del siglo XVIII y comienzos
del XIX  la vanguardia revolucionaria del
mundo? ¿no era acaso un avance el modelo capitalista y republicano allí
existente, frente al aun semifeudal y monárquico que se restauró en Europa
después del Congreso de Viena? ¿No es exagerar cuando se le tílda de leguleyo y
defensor del status quo? Para el momento, los dos representaron intereses de
familias poderosas, a las que les interesaba mantener un régimen conservador y
semifeudal, amenazado por los movimientos liberales que se fortalecían en
España, en un imperio que no necesitaba revoluciones de independencia, sino una
revolución republicana, que removiera las bases sociales y revolucionara el
anquilosado modo de producción
. Eso ninguno lo hizo.
Si de hablar de progresismo se trata, de los
seguidores de Bolívar saldrían los fundadores del Partido Ministerial, fundador
más tarde del Conservatismo, mientras que de los amigos de Santander saldrían
los liberales, defensores acérrimos del Libre Mercado. El único héroe
progresista de esa generación, no ocupó ningún puesto de relevancia ni con
Santander ni con Bolívar, y cayó pronto al olvido: José María Melo, el primer
indígena que llegó a ser Jefe de Estado en un país americano
, intentando hacer
las verdaderas reformas que necesitaba el país, frente al cual tanto liberales
como conservadores aunaron esfuerzos y pusieron sus intereses de clase por
encima de su ideología y en tan solo 10 meses no solo lo derrocaron, sino que
desterraron a sus más fieles seguidores a las selvas de Panamá, donde morirían
víctimas de enfermedades como el paludismo o la fiebre amarilla.

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