Las aprendices Yeimi Valeria Chávez, de 13 años, y Karol Yael Muñoz, de 16, son las ganadoras de ‘Ella es Astronauta Virtual’. Este evento, organizado por la Fundación She is, en alianza con el Space Center de la NASA, el aeropuerto El Dorado, Organon y Bancolombia, busca impactar positivamente la vida de niñas y jóvenes en condiciones de vulnerabilidad, empoderándolas e inspirándolas a ser agentes de cambio en sus comunidades.
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Después de cuatro meses de capacitación, sus proyectos compitieron con más de 100 propuestas de distintas regiones de Colombia. Tras la evaluación de jurados expertos, obtuvieron dos cupos para formar parte de este programa, que incluye el desarrollo de habilidades blandas y la resolución de problemáticas actuales, así como formación en emprendimiento social. Culmina con una inmersión de una semana en las instalaciones del Centro Espacial de la NASA en Houston, Texas, en 2025, donde tendrán la oportunidad de experimentar el entorno espacial y potenciar sus habilidades a través de actividades prácticas.
Yeimi Valeria Chávez, originaria del municipio de La Florida y estudiante de la I.E. San Bartolomé, obtuvo el primer lugar en el concurso por su proyecto de Gestión de Riesgos Sísmicos, que incluye un prototipo del volcán Galeras y una aplicación que simula un sismógrafo.
“Mi proyecto emplea programación y tecnología para la gestión de riesgos sísmicos, ya que mi pueblo está en una zona de alta amenaza por el Galeras. Incluye un prototipo del volcán con sistemas de alerta y una aplicación que simula un sismógrafo”, mencionó Yeimi Valeria Chávez, aprendiz de la Tecnoacademia Itinerante de Nariño.
Por su parte, Karol Jaelly Muñoz Sacanambuy, procedente de la Institución Educativa Villamoreno de Buesaco, presentó su proyecto llamado “Lombritech”, que se centra en la producción de abono orgánico de alta calidad. Este prototipo aborda la problemática del alto costo de los fertilizantes químicos, promoviendo el uso de lombrices rojas californianas para mejorar la rentabilidad de los cultivos. Ella obtuvo el segundo lugar.
“Nuestro objetivo es crear un abono orgánico que beneficie el cultivo de café, que generalmente presenta deficiencias de nitrógeno, fósforo y potasio. Así, mejorará su crecimiento y producción, evitando químicos dañinos y reduciendo el riesgo de enfermedades. Estoy feliz de poder ayudar a mi comunidad y a los agricultores”, expresó Karol Muñoz.
El trabajo de estas aprendices no solo resalta el talento juvenil de Nariño, que por segundo año consecutivo triunfa en esta convocatoria, sino que también pone de manifiesto la importancia de la innovación y la educación en la construcción de un futuro más sostenible para la región.
Fuente y foto: SENA