Un año del fallecimiento de Guillermo Montenegro Orbes

Spread the love

Guillermo Montenegro Orbes (QEPD)
El 23 de septiembre de 2013 falleció Guillermo
Montenegro Orbes, director de la emisora comunitaria Papialpa Stereo del
municipio de Pupiales y contador de la red de emisoras comunitarias de Nariño
Sindamanoy.

Para recordar su memoria el pasado sábado se celebró una eucaristía en su ciudad natal y su
esposa, la profesora Nydia Yolanda Cárdenas Padilla, expresó unas sentidas
palabras que compartimos con ustedes
.

EXTRAÑAR…
Por Nydia Yolanda Cárdenas Padilla
Es sentir el vacío de alguien que se fue.
Ese vacío que embarga tu vida, tu corazón y
toda tu alma
, un dolor inexplicable, que no hay palabras que te consuelen.
Extrañar es sentir como una parte de ti, se va
cuando alguien parte al cielo.
Extrañar, lo vives, cuando realmente sabes lo
que es AMAR.
Aún con el dolor inexplicable que enfrentamos,
no nos queda otra alternativa que erguirnos y ser fuertes, porque muchas veces
cuando se es el bastión de la familia no podemos derrumbarnos
. No podemos
desesperarnos por el dolor, pues arrastraríamos a otros que también amamos y
que también sufren como nosotros por la pérdida física de quien se marcha.
Bien sabido es que no se supera la muerte,
pero aprendemos a vivir con la ausencia de nuestros seres queridos, con la
melancolía que aún después del paso de tiempo nos asalta y nos lastima.
No se puede explicar los sentimientos que
provoca la partida de alguien a quien amamos, menos aun cuando la muerte se presenta
de improviso.
Nos enfrentamos a un mundo nuevo, a una vida
que no nos imaginamos que existía, nos enfrentamos al camino que desde ese
momento debemos recorrer
sin aquel a quien tanto amamos y que ya no está.
Cuando estamos felices con los que amamos, no
pensamos por un momento que no somos los dueños de la vida, nos olvidamos que
ninguno nos prometió que seríamos eternos en esta vida terrenal
, no pensamos en
los sucesos imprevistos que muchas veces golpean inmisericordemente.
Los ángeles decidieron darle una mejor vida y
llevarlo junto a ellos.
Ahora que está en los brazos del Señor desde
el cielo será una estrellita que cuidará de nosotras.
Su misión en este mundo terminó hace un año
pero su legado está presente en todos nosotros
y estamos agradecidos por todo
lo que hizo, gracias por todo lo que compartió con nosotras.

La muerte no es algo que se supere, es algo
que se acepta. Quizá no encontremos la salida en mucho tiempo, pero hay algo
que ni siquiera la muerte rompe: el AMOR, y aunque ya no podamos verlo, ni
sentir su aroma, ni escuchar su voz, ni mirarle a los ojos, ni abrazarle
físicamente, siempre podremos cerrar nuestros ojos para recordarlo, para
decirle desde nuestro corazón que lo amamos, y que lo extrañamos
.
Y desde ahí, es donde nace el verdadero
consuelo: desde la eternidad de un sentimiento. Guillermo está con nuestro
Señor, y desde allí nos enviará toda su paz.
Hoy comprendemos el dolor de la pérdida. Aún
no logramos aceptarlo, pero de a poco lograremos caminar sabiendo que está
sentado en la mesa del Señor, ¿qué gran privilegio, verdad?
Hoy sólo queda esperar que el tiempo haga lo
suyo y traiga paz, porque mientras permanezca en nuestro corazón y mente, su
marcha sólo habrá sido en cuerpo. Pues estará siempre en cada rosa del jardín,
en cada gota de lluvia, en cada canción
.
Cada vez que lo nombremos seguro que nos
estará mirando y deseando que estemos bien, que no lloremos, pues estará en paz
con Dios y mucho más con todos los que amó…
Absorberemos el dolor, pero también le daremos
alas para que vuele en paz
.
Las tristezas del adiós pinchan como una aguja
en el corazón.
Pero aun consciente del dolor que se siente,
el tiempo lo cura todo.
Esta dolorosa experiencia nos servirá para
madurar. Es bueno guardar silencio cada día, para ver qué nos pasa y hacia dónde
queremos ir
. Debemos aprender a cerrar capítulos para volver abrir otros
nuevos, pero con más experiencias y menos fallos.
Es bueno que siempre nos miremos al espejo y
sepamos desear seguir con nuestra vida, progresar, madurar, luchar y disfrutar
y para probar la dulzura de la vida, habremos probado la amargura.
Le pedimos a Dios que nos cuide y nos de
fuerzas ante la adversidad y cuando por fin se disipe el dolor insoportable, la
angustia y la tristeza profunda, nos queda el recuerdo… y ese recuerdo es
nuestro tesoro.
Cuando se pierde a un ser querido nos
planteamos muchas preguntas y vamos entendiendo los ciclos de la vida,
inevitablemente aceptamos que las cosas ocurren independientemente de lo que
nosotros deseábamos o esperábamos
.
Pienso que lo natural es nacer y morir pero
cuando a un ser querido le llega la hora, sea como fuere, parecemos no estar
preparados, como si fuera algo que nunca pudiera ocurrir, como si estuviera
ajeno a nuestra condición de humanos. Cierto día pasa y entonces pensamos en
porque no disfrutamos de esa persona, porque no aprendimos de ella, porque….
Muchas preguntas pero la respuesta está muy clara: vivamos con plena conciencia
cada segundo, disfrutemos cada paso de la vida, y aceptemos todo lo que ocurra
con alegría y buen carácter
.
No me cabe duda que tras la muerte, para las
grandes personas están reservados los grandes lugares. Ese gran lugar es un
regalo y ese regalo es permanecer en los corazones de los que lo hemos querido.
Eso significa ser eterno y la eternidad es inmortal, ahora nos toca vivir con
valentía y tenacidad y en su memoria, hacer todas las cosas mejor que antes; no
alimentarnos de soledad con días vacíos si no con actos útiles
.
Daremos nuestras manos para ayudar, consolar y
animar.
Gracias a todos por su presencia, por
acompañarnos siempre, por animarnos a seguir adelante, por estar pendientes de
nosotras, por sus palabras oportunas y sus cálidos abrazos
. Gracias amigas de
mi Normal por regalarnos calidez, ternura, amistad.

Noticias relacionadas

Falleció director de emisora comunitaria de Pupiales

Mensajes de condolencia por muerte de radialista

Pupiales le dio el último adiós a uno de sus hijos

Se fue un gran amigo y compañero

Author: Admin

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *