En la capilla de la Institución Educativa Nuestra Señora de Fátima de Sandoná, siete de las 13 exalumnas franciscanas de la primera promoción del plantel se reunieron para celebrar los 50 años de su graduación como bachilleres.
En la ceremonia estuvieron presentes, Socorro Acosta Meza, Amanda Caicedo Meza, Socorro Castillo Chamorro, Piedad Delgado Insuasty, Mirian Erazo Castillo, Ruth Mercedes Insuasty Arcos y Clara Inés Sánchez Tobar. Por diferentes compromisos no pudieron asistir: Nubia Insuasty Zambrano, Consuelo Meza, Gladis Melo Maya, Mercedes Morán Montezuma y Alicia Mora Arcos. La exalumna María del Rosario Mora Arcos falleció hace algunos años.
El acto, que inició con una eucaristía de acción de gracias presidida por el presbítero Roberto Hoyos Realpe, contó con la asistencia de las docentes de la época, Odyla Salas Arcos y Rosario Valencia Montezuma, así como de las directivas del plantel educativo, los familiares de las exalumnas y la hermana Rosa Julia Ibarra Córdoba, superiora de la Provincia Nuestra Señora de la Merced.
Antes de finalizar la eucaristía, la rectora de la institución educativa, Mercedes Martínez Murcia, leyó el diploma especial. Una a una, las exalumnas desfilaron por el centro de la capilla, evocando el emotivo momento de su graduación hace 50 años.
El acto continuó con una sesión de fotografías y concluyó en un aula de la institución donde se realizó un brindis, seguido de las emotivas palabras de las exalumnas y algunos invitados.
Ahora puede seguirnos en Facebook y en nuestro WhatsApp Channel
Las exalumnas participaron este viernes en la caravana de apertura del año jubilar de la institución franciscana, que el próximo año cumplirá 75 años de servicio educativo a la comunidad sandoneña.
-
-
-
-
-
Excelente iniciativa de las exalumnas INEFA asistentes al reencuentro en la institución donde culminaron su educación secundaria; además, integrantes de la primera promoción de egresadas.
Debe ser una actividad bastante dispendiosa lograr ese noble y ansioso momento, superado con creces por la gratificante emoción, alegría y, supongo, hasta lágrimas difíciles de contener.
Felicitaciones a ese grupo de damas, a quienes tuve el privilegio de conocer en aquellos años maravillosos.
Un abrazo.