El historiador
Enrique Herrera Enríquez le envió una carta al alcalde de Pasto Pedro Vicente
Obando en la cual expresa su oposición a la decisión de la administración
municipal de ubicar nuevamente la estatua del General Simón Bolívar en el
sector del Ejido.
Enrique Herrera Enríquez le envió una carta al alcalde de Pasto Pedro Vicente
Obando en la cual expresa su oposición a la decisión de la administración
municipal de ubicar nuevamente la estatua del General Simón Bolívar en el
sector del Ejido.
El texto de la carta publicada por su autor en su cuenta de la red social virtual Facebook, ha generado una gran cantidad de comentarios de los cibernautas a favor y en contra de su contenido.
La decisión de ubicar nuevamente la estatua del General Bolívar en el parque, conocido ancestralmente como El Ejido, queda en manos del mandatario de los pastusos Pedro Vicente Obando.
Este es el
texto completo de la misiva del historiador Herrera Enríquez:
texto completo de la misiva del historiador Herrera Enríquez:
CARTA ABIERTA
AL ALCALDE DE PASTO.
AL ALCALDE DE PASTO.
San Juan de
Pasto, 24 de Junio de 2016
Doctor.
PEDRO VICENTE
OBANDO.
OBANDO.
Alcalde de
Pasto.
Pasto.
La Ciudad.
Señor Alcalde:
Con el
sentimiento de pastuso raizal, estudioso e investigador de nuestra historia,
soy conocedor de la oprobiosa determinación que ha tomado la administración a
su cargo respecto a la ubicación nuevamente de la estatua del General Simón
Bolívar en el sector que ancestralmente se conoce como El Ejido.
sentimiento de pastuso raizal, estudioso e investigador de nuestra historia,
soy conocedor de la oprobiosa determinación que ha tomado la administración a
su cargo respecto a la ubicación nuevamente de la estatua del General Simón
Bolívar en el sector que ancestralmente se conoce como El Ejido.
La
administración anterior que estuvo bajo la dirección del Dr. HAROLD GUERRERO
LOPEZ, como Alcalde Pasto, consideró oportuno remodelar El Parque El Ejido,
rescatando primeramente el nombre histórico del sector, desmontando la estatua
de Simón Bolívar “que por motivos de diseño urbanísticos del proyecto de
“Adecuación y mejoramiento de los espacios deportivos y recreativos del Parque
El Ejido, ubicado en la Comuna 2 del Municipio de Pasto”. El diseño definitivo
NO CONTEMPLA LA UBICACIÓN DEL MUNUMENTO DE SIMON BOLIVAR EN LA IMPLANTACION DEL
PARQUE, POR EL CONTRARIO SE CONTEMPLA LA INSTALACION DE BANDERAS ANCLAJE EN
CONCRETO”, según reza la respuesta que dio el Subsecretario de Infraestructura
Urbana: Luis Armando Merino Chamorro, al Dr. Roberto Segovia Benavides, en
oficio 1521/0090-2016, fechado el 7 de abril del presente año.
administración anterior que estuvo bajo la dirección del Dr. HAROLD GUERRERO
LOPEZ, como Alcalde Pasto, consideró oportuno remodelar El Parque El Ejido,
rescatando primeramente el nombre histórico del sector, desmontando la estatua
de Simón Bolívar “que por motivos de diseño urbanísticos del proyecto de
“Adecuación y mejoramiento de los espacios deportivos y recreativos del Parque
El Ejido, ubicado en la Comuna 2 del Municipio de Pasto”. El diseño definitivo
NO CONTEMPLA LA UBICACIÓN DEL MUNUMENTO DE SIMON BOLIVAR EN LA IMPLANTACION DEL
PARQUE, POR EL CONTRARIO SE CONTEMPLA LA INSTALACION DE BANDERAS ANCLAJE EN
CONCRETO”, según reza la respuesta que dio el Subsecretario de Infraestructura
Urbana: Luis Armando Merino Chamorro, al Dr. Roberto Segovia Benavides, en
oficio 1521/0090-2016, fechado el 7 de abril del presente año.
A la anterior
respuesta, motivado quien sabe por qué y por quién?, el mismo funcionario Luis
Armando Merino Chamorro, Subsecretario de Infraestructura Urbana, se retracta,
da pie atrás con su concepto y procede a enviar al Dr. Roberto Segovia
Benavides, el oficio 1521/175/2016, fechado el 10 de mayo, donde dice: “me
permito informarle que mediante oficio 140 de abril 29 del presente año, se solicitó
a la Secretaria de Planeación un Concepto Técnico, mediante el cual se
viabilice el traslado del Monumento “Simón Bolívar”. La Subsecretaria de
Ordenamiento Territorial, mediante oficio 1511/0505/2016 de mayo 16 nos informa
que dicho monumento debe ser reubicado en el lugar adecuado dentro del Parque
Ejido y con las condiciones técnicas que garanticen su conservación”
respuesta, motivado quien sabe por qué y por quién?, el mismo funcionario Luis
Armando Merino Chamorro, Subsecretario de Infraestructura Urbana, se retracta,
da pie atrás con su concepto y procede a enviar al Dr. Roberto Segovia
Benavides, el oficio 1521/175/2016, fechado el 10 de mayo, donde dice: “me
permito informarle que mediante oficio 140 de abril 29 del presente año, se solicitó
a la Secretaria de Planeación un Concepto Técnico, mediante el cual se
viabilice el traslado del Monumento “Simón Bolívar”. La Subsecretaria de
Ordenamiento Territorial, mediante oficio 1511/0505/2016 de mayo 16 nos informa
que dicho monumento debe ser reubicado en el lugar adecuado dentro del Parque
Ejido y con las condiciones técnicas que garanticen su conservación”
Es decir en un
mes, se cambió el concepto que tuvo la administración del Dr. Harold Guerrero
López, para quitar la estatua de Simón Bolívar del sector que al menos el
Subsecretario de Infraestructura respeta denominándolo “Parque El Ejido”.
mes, se cambió el concepto que tuvo la administración del Dr. Harold Guerrero
López, para quitar la estatua de Simón Bolívar del sector que al menos el
Subsecretario de Infraestructura respeta denominándolo “Parque El Ejido”.
Esta situación
se considera oprobiosa, ignominiosa, insultante para con la gente de Pasto que
conocedora de la siniestra imagen de un personaje que como Simón Bolívar dio la
orden de destrucción de acuerdo con el General José María Obando en sus
“Apuntamientos para la Historia” cuando dice: “sentencia a Pasto a SER BORRADO
DEL CATALOGO DE LOS PUEBLOS, sentencia bárbara que hasta entonces había sido fielmente
ejecutada…”.
se considera oprobiosa, ignominiosa, insultante para con la gente de Pasto que
conocedora de la siniestra imagen de un personaje que como Simón Bolívar dio la
orden de destrucción de acuerdo con el General José María Obando en sus
“Apuntamientos para la Historia” cuando dice: “sentencia a Pasto a SER BORRADO
DEL CATALOGO DE LOS PUEBLOS, sentencia bárbara que hasta entonces había sido fielmente
ejecutada…”.
El criminal
comportamiento del venezolano para con Pasto y su gente es tan evidente que ha
dado para la publicación de varias obras al respecto, entre las cuales están:
“ESTUDIOS SOBRE LA VIDA DE BOLIVAR”, de José Rafael Sañudo, y “BOLIVAR EN LA
HISTORIA DE PASTO”, de mi autoría, que Usted Señor Alcalde la tiene por cuanto
me permití en su momento hacerle entrega de un ejemplar.
comportamiento del venezolano para con Pasto y su gente es tan evidente que ha
dado para la publicación de varias obras al respecto, entre las cuales están:
“ESTUDIOS SOBRE LA VIDA DE BOLIVAR”, de José Rafael Sañudo, y “BOLIVAR EN LA
HISTORIA DE PASTO”, de mi autoría, que Usted Señor Alcalde la tiene por cuanto
me permití en su momento hacerle entrega de un ejemplar.
Los macabros
episodios del 24-25 y 26 de diciembre de 1822, más conocidos como la
“Sangrienta Navidad” que ejecutaran los ejércitos al mando del General Antonio
José de Sucre, por órdenes expresas de Simón Bolívar, sería suficiente para
quitar del pedestal en Pasto a este sanguinario General venezolano. “Al combate
leal y terreno abierto sucedió una carnicería-dice el historiador Roberto
Botero Saldarriaga, quien continua: los soldados colombianos ensoberbecidos por
la resistencia, degollaron indistintamente a los vencidos, hombres y mujeres,
sobre aquellos mismo puntos que tras porfiada brega habían tomado. Al día
siguiente cuatrocientos cadáveres de los desgraciados pastusos, hombres y
mujeres, abandonados en las calles y campos aledaños a la población, con los
grandes ojos serenamente abiertos hacia el cielo, parecían escuchar absortos el
Pax Omnibus, que ese día del nacimiento de Jesús, entonaban los sacerdotes en
los ritos de navidad…”
episodios del 24-25 y 26 de diciembre de 1822, más conocidos como la
“Sangrienta Navidad” que ejecutaran los ejércitos al mando del General Antonio
José de Sucre, por órdenes expresas de Simón Bolívar, sería suficiente para
quitar del pedestal en Pasto a este sanguinario General venezolano. “Al combate
leal y terreno abierto sucedió una carnicería-dice el historiador Roberto
Botero Saldarriaga, quien continua: los soldados colombianos ensoberbecidos por
la resistencia, degollaron indistintamente a los vencidos, hombres y mujeres,
sobre aquellos mismo puntos que tras porfiada brega habían tomado. Al día
siguiente cuatrocientos cadáveres de los desgraciados pastusos, hombres y
mujeres, abandonados en las calles y campos aledaños a la población, con los
grandes ojos serenamente abiertos hacia el cielo, parecían escuchar absortos el
Pax Omnibus, que ese día del nacimiento de Jesús, entonaban los sacerdotes en
los ritos de navidad…”
El propio
secretario de Bolívar, el General Daniel O´Leary, no oculta el terror de cuanto
observó: “En la horrible matanza que siguió soldados y paisanos, hombre y
mujeres fueron promiscuamente sacrificados.”
secretario de Bolívar, el General Daniel O´Leary, no oculta el terror de cuanto
observó: “En la horrible matanza que siguió soldados y paisanos, hombre y
mujeres fueron promiscuamente sacrificados.”
Los Generales
venezolanos: Bartolomé Salom, José de la Cruz Paredes y Juan José Flores, entre
otros cumplieron fielmente las órdenes de Bolívar para exterminar a la gente de
Pasto, no en vano, desde Potosí en Bolivia, escribe Bolívar a Santander, el 21
de octubre de 1825:” “Los pastusos deben ser aniquilados, y sus mujeres e
hijos transportados a otra parte, dando aquel país a una colonia militar. De
otro modo Colombia se acordará de los pastusos cuando haya el menor alboroto o
embarazo, aun cuando sea de aquí a cien años, porque jamás se olvidarán de
nuestros estragos”.
venezolanos: Bartolomé Salom, José de la Cruz Paredes y Juan José Flores, entre
otros cumplieron fielmente las órdenes de Bolívar para exterminar a la gente de
Pasto, no en vano, desde Potosí en Bolivia, escribe Bolívar a Santander, el 21
de octubre de 1825:” “Los pastusos deben ser aniquilados, y sus mujeres e
hijos transportados a otra parte, dando aquel país a una colonia militar. De
otro modo Colombia se acordará de los pastusos cuando haya el menor alboroto o
embarazo, aun cuando sea de aquí a cien años, porque jamás se olvidarán de
nuestros estragos”.
El propio
Bolívar reconoce el genocidio con Pasto y su gente cuando afirma a Santander el
21 de Julio de 1823 en carta que suscribe desde Quito: “Logramos, en fin,
destruir a los pastusos. No se si me equivoco como me he equivocado otras veces
con esos malditos hombres, pero me parece que por ahora no levantaran más su
cabeza los muertos. Yo he dictado medidas terribles contra ese infame pueblo y
Usted tendrá una copia para el ministerio, de las instrucciones dadas al
General Salom. Las mujeres mismas son peligrosísimas. Lo peor de todo, es que
cinco pueblos de los Pastos son igualmente enemigos, y algunos de Patía también
lo son. Quiere decir esto que tenemos un cuerpo de más de 3.000 almas contra
nosotros, pero una alma de acero que no plega por nada…”. Es decir de ocho mil
personas que tenía Pasto solo quedaron tres mil, acabó con las tres cuartas
partes de la población civil de la ciudad sin discriminación alguna.
Bolívar reconoce el genocidio con Pasto y su gente cuando afirma a Santander el
21 de Julio de 1823 en carta que suscribe desde Quito: “Logramos, en fin,
destruir a los pastusos. No se si me equivoco como me he equivocado otras veces
con esos malditos hombres, pero me parece que por ahora no levantaran más su
cabeza los muertos. Yo he dictado medidas terribles contra ese infame pueblo y
Usted tendrá una copia para el ministerio, de las instrucciones dadas al
General Salom. Las mujeres mismas son peligrosísimas. Lo peor de todo, es que
cinco pueblos de los Pastos son igualmente enemigos, y algunos de Patía también
lo son. Quiere decir esto que tenemos un cuerpo de más de 3.000 almas contra
nosotros, pero una alma de acero que no plega por nada…”. Es decir de ocho mil
personas que tenía Pasto solo quedaron tres mil, acabó con las tres cuartas
partes de la población civil de la ciudad sin discriminación alguna.
Es lo cierto
que aún es tiempo de recapacitar. Si en verdad la citada estatua estaba ubicada
en aquel lugar, recuerde que fue imposición del dictador Gustavo Rojas Pinilla
a su subalterno Sergio Antonio Ruano, Gobernador del Departamento de Nariño.
que aún es tiempo de recapacitar. Si en verdad la citada estatua estaba ubicada
en aquel lugar, recuerde que fue imposición del dictador Gustavo Rojas Pinilla
a su subalterno Sergio Antonio Ruano, Gobernador del Departamento de Nariño.
Usted, Dr.
Pedro Vicente Obando, tiene la amplia facultad de disponer a su libre albedrio
esta crítica situación que se plantea cual es la de reubicar la estatua de un
militar genocida que pretendió BORRAR DEL CATALOGO DE LOS PUEBLOS A PASTO, y en
su lugar construir el anclaje en concreto para ubicar las banderas de Pasto,
Nariño y Colombia.
Pedro Vicente Obando, tiene la amplia facultad de disponer a su libre albedrio
esta crítica situación que se plantea cual es la de reubicar la estatua de un
militar genocida que pretendió BORRAR DEL CATALOGO DE LOS PUEBLOS A PASTO, y en
su lugar construir el anclaje en concreto para ubicar las banderas de Pasto,
Nariño y Colombia.
Hoy no son los
tiempos de ayer, la gente tiene cabal conocimiento de quien fue Simón Bolívar
con Pasto y su gente. De continuar con el proyecto de ubicar a Bolívar en el
pedestal del Parque El Ejido, deberían como complemento al “homenaje a
homicidas de Pasto” que pongan las estatuas de los Generales venezolanos:
Antonio José de Sucre, Bartolomé Salom, José de la Cruz Paredes y Juan José
Flores, confesos criminales que obedeciendo órdenes impartidas por Bolívar,
procedieron a exterminar a Pasto y su gente.
tiempos de ayer, la gente tiene cabal conocimiento de quien fue Simón Bolívar
con Pasto y su gente. De continuar con el proyecto de ubicar a Bolívar en el
pedestal del Parque El Ejido, deberían como complemento al “homenaje a
homicidas de Pasto” que pongan las estatuas de los Generales venezolanos:
Antonio José de Sucre, Bartolomé Salom, José de la Cruz Paredes y Juan José
Flores, confesos criminales que obedeciendo órdenes impartidas por Bolívar,
procedieron a exterminar a Pasto y su gente.
Adjunto a la
presente una crónica que título: “POR QUE NO DEBE IR LA ESTATUA DE BOLIVAR EN
PASTO.
presente una crónica que título: “POR QUE NO DEBE IR LA ESTATUA DE BOLIVAR EN
PASTO.
Atentamente,
ENRIQUE HERRERA
ENRIQUEZ
ENRIQUEZ