En el auditorio de la Alcaldía Municipal de Sandoná, se llevó a cabo el Encuentro Departamental de Libertad Religiosa, un evento que reunió a destacados líderes religiosos y autoridades para dialogar sobre este tema y su impacto en la comunidad.

El pastor Jairo Montenegro, miembro del Comité Nacional de Libertad Religiosa, estuvo presente en el evento. También se contó con la participación del pastor Jairo Cardozo, de la Mesa Nacional de Asuntos Religiosos, y la primera dama del departamento, Ingrid Cortés. Representantes del Ministerio del Interior de Bogotá, alcaldes de diferentes municipios y secretarios de gobierno también se hicieron presentes, subrayando la relevancia de esta reunión.

El evento se centró en la discusión sobre la implementación de políticas públicas de libertad religiosa, destacando el Decreto 437 aprobado en 2017, que ha sido una base para desarrollar políticas similares a nivel departamental y municipal. En Sandoná, la política pública de libertad religiosa se adoptó en 2021, estableciendo la Mesa Municipal de Asuntos Religiosos.

El pastor Montenegro explicó que esta política busca resaltar el aporte social del sector religioso al bienestar común y al tejido social, además de promover el conocimiento de los derechos relacionados con la libertad religiosa. Actualmente, en el departamento de Nariño, 21 municipios han implementado mesas de libertad religiosa en colaboración con el sector religioso y la Gobernación de Nariño. El objetivo es extender esta iniciativa a todos los 64 municipios del departamento.

La Mesa Departamental de Asuntos Religiosos y la Gobernación tienen un plan para visitar siete municipios adicionales este año con el fin de fomentar la implementación de políticas públicas de libertad religiosa y establecer mesas municipales.

En el ámbito nacional, se estima que hay cerca de 980 iglesias con personería jurídica, según datos de la Dirección Nacional de Asuntos Religiosos del Ministerio del Interior. Este organismo, encabezado por la doctora Amelia Cortés, trabaja para garantizar que las diferentes creencias y congregaciones puedan ejercer su derecho a la libertad religiosa.

Durante el encuentro, se analizó cómo las administraciones municipales pueden articularse con parroquias e iglesias para potenciar sus labores sociales. El sector religioso desempeña un papel crucial en el tejido social, ofreciendo apoyo en áreas donde el Estado a menudo no llega, brindando soluciones sociales, económicas y espirituales a quienes lo necesitan.

El pastor Jairo Montenegro, delegado del sector religioso del departamento de Nariño, agradeció a todos los participantes y expresó su compromiso de seguir trabajando en pro de la libertad religiosa. “Estamos aquí para representar al sector religioso y para articular esfuerzos que beneficien a nuestra comunidad”, concluyó Montenegro.