Este jueves en las instalaciones de la Casa Artesanal de Sandoná se desarrolló la tercera actividad del proyecto “Sabores y saberes de las mujeres del Guaico”, con presencia de señoras dedicadas a la gastronomía y estudiantes de las instituciones educativas Simón Bolívar, Jesús de Praga y Nuestra Señora de Fátima.

La coordinadora del proyecto Ana Calpa indicó que en esta actividad denominada “el cocinatorio” se contó con la presencia del cocinero Anibal Criollo de El Encano, municipio de Pasto, quien le gustó porque el proyecto porque contiene dos elementos fundamentales: la recuperación del buen vivir y la soberanía alimentaria.

Dijo que el proyecto arrancó el 1º de junio, con la realización del primer taller denominado el baúl de la memoria, en la cual las mujeres sandoneñas contaron sus historias relacionadas con la gastronomía típica sandoneña.

En Sandoná se adelanta la investigación de la elaboración de la choriza, las leches batidas, las melcochas y el chirle, entre otros productos alimenticios, con las señoras que se han dedicado a este oficio, que las han llamado “las empoderadas”.

En Sandoná el proyecto continuará con la presentación de un videoclip, elaborado por Selma Martínez, quien realiza el cubrimiento de todas las jornadas y posteriormente se entregaría el informe final.

La coordinadora destacó la colaboración de la Administración Municipal, a través de las oficinas de cultura y turismo, orientadas por Danny Rodríguez Bastidas y Mario Rosero Córdoba.

El cocinero tradicional Anibal Criollo se refiere a la preparación de la arepa andina y a la utilidad de la sidra

La señorita Astrid Guerrero, integrante de la microempresa Dulces Guerrero, dijo que el taller fue muy importante porque se trató de la recuperación de la cocina tradicional y entre sus aprendizajes destacó que se debe aprovechar al máximo los terrenos a los cuales hay que sembrar de todo y aprendió sobre la elaboración de la arepa de callana.

La profesora Mireya Cabrera, docente de la Institución educativa Jesús de Praga del corregimiento del Bolívar explicó que desde hace dos años el plantel desarrolla un proyecto de turismo enfocado en la gastronomía y en el conocimiento de lugares históricos de Sandoná y agregó que para esta jornada seleccionó 10 estudiantes del grado décimo que tienen habilidades para la cocina.

La productora audiovisual Selma Martínez quedó sorprendida con la historia de la señora Magola Ortega quien le relató sobre la experiencia de la producción de “la choriza sandoneña”, como un sostén de su familia.

El abogado Luis Eduardo Calpa, integrante del grupo investigador, realizó una dinámica con los asistentes basado en el cuento “La rana que quería ser una rana auténtica” del escritor hondureño Augusto Monterroso.

Los asistentes se dividieron en cuatro grupos. En cada grupo leyeron el cuento, le pusieron el nombre al grupo y extrajeron el mensaje que luego socializaron en plenaria.

En esta instancia contaron la experiencia en cada grupo, cómo se sintieron, las dificultades para trabajar en equipo, porque el nombre del grupo y compartieron la reflexión sobre la enseñanza del cuento. La lección de todos los grupos es que debemos sentirnos orgullosos de lo que somos.

El profesional del derecho manifestó que hay que continuar con el proceso de recuperación de los saberes ancestrales y de la cocina criolla y agregó que “nadie vendrá a Sandoná a comer pollo a la broster”.

El alcalde Byron Zambrano Rosas se hizo presente en el taller en compañía de las secretarias de gobierno Ana María López Vallejo y de hacienda Arellis Daza Narvaez.

El proyecto se adelanta en el marco del Programa Cultura Convoca de la Dirección Administrativa de Cultura de Nariño y tiene como objetivo recuperar el patrimonio gastronómico en los municipios de Sandoná, La Florida y Nariño.

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