Por Pablo Emilio Obando Acosta
Profundo pesar embarga a los nariñenses por el fallecimiento del músico Hipólito Jojoa, integrante de la RONDA LIRICA. Durante muchos años ejecutó en esta mítica agrupación musical nariñense el violín, ganándose el cariño, afecto y admiración de cientos y de miles de sus seguidores que apreciaron su arte artístico y musical.
En el año 2015 en compañía del músico CHUCHO VALLEJO se le rindió un sentido tributo de admiración con la grabación de un CD en las cuales se recopila una serie de canciones grabadas originalmente con RONDA LIRICA en la ciudad de Medellín en el año de 1967 gracias al empresario Ramiro Chaves L. Acetatos que se constituyeron en un valioso aporte para alcanzar la identidad musical de Nariño y el definitivo reconocimiento del Son Sureño.
Igualmente se quiso editar un video documental con la vida de HIPOLITO JOJOA, iniciativa que quedó truncada por la falta de apoyo de las autoridades municipales de la época, alcanzándose la mitad de este proyecto y que hoy se constituye en un valioso documento regional.
A POLITO, como cariñosamente le llamábamos sus amigos, también se le conocía como EL CACIQUE DE LA LAGUNA por ser propio de esta región del municipio de Pasto y uno de los primeros corregidores que tuvo la localidad.
Polito fue amigo personal de grandes personalidades del departamento de Nariño y reconocido como una leyenda del folclor musical regional. Su paso por diferentes agrupaciones musicales enriqueció el pentagrama musical regional.
Hoy Nariño entero llora la despedida de EL ULTIMO JUGLAR DE RONDA LIRICA, por cuanto se cierra definitivamente un ciclo de una de las épocas más gloriosas de nuestra música. Interpretó magistralmente con su violín temas del Chato Guerrero, Luis E. Nieto, Maruja Hinestrosa de Rosero y de tantos músicos y compositores logrando popularizarlos y volverlos parte del folclor regional.
Paz en su tumba, adiós al amigo que en tantas ocasiones nos acompañó con sus sentidas notas musicales, con su grata sonrisa y con ese abrazo que traspasaba afectos y corazones. Hasta siempre amigo POLITO, seguirás presente en esas dulces canciones que tanto nos deleitaban mientras una sonrisa y una palabra dulce nos embriagaba como justo homenaje a la amistad.
Un abrazo afectuoso y solidario a sus familiares y conocidos, a sus amigos músicos que tanto lo apreciaron y quisieron. Se va un grande, Hipólito Jojoa, EL ULTIMO JUGLAR DE RONDA LIRICA. Esperamos el pronunciamiento del Concejo Municipal de Pasto y de la Asamblea Departamental de Nariño.
Recordemos una de nuestras crónicas sobre HIPOLITO JOJOA:
Desde muy niño, 8 años, sintió el llamado de la música, tanto que tuvo que implorarle a su tío para que le enseñe a tocar la guitarra y la bandola a cambio de unas cuantas jornadas de trabajo en el campo. Natural de La laguna, es popularmente conocido como “El Cacique” por el color prieto de su piel y su saludar de mano alzada y abierta. Lo encontramos en la Plaza de Nariño, rodeado de amigos y conocidos a quienes cuenta con profunda nostalgia como ingresó a la Ronda Lírica en reemplazo de Segundo Vivanco, violinista de grata recordación. Sus palabras salen lentas, silenciosas, casi imperceptibles: “Cuando me invitaron a hacer parte de la Ronda Lírica, casi no podía creerlo, puesto que era la agrupación musical más famosa de Nariño. Fue gracias a don Lucio Pastrana y a Bolívar Mesa que conocí a los demás músicos. Claro que en un comienzo no se llamaba así, sino que tenía el nombre de Balalaica, pero Gonzalo Cortes nos dijo que ese nombre era feo y nos bautizó como Ronda Lírica…”.
Recuerda como el mecenas y empresario Ramiro Chávez L. escuchando sus notas musicales y extasiado ante ellas les propuso viajar a Medellín en el año de 1967 para grabar una larga duración con doce temas. No tuvieron que pensar mucho para aceptar y deciden emprender un viaje en avión con los tiquetes que “nos dio don Ramiro”. Pero se les atraviesa en al camino don Pablo Cuaspa, quien les expresa su deseo de acompañarlos en esta gira y ofrece su camioneta para realizar el viaje hasta Medellín: “Únicamente nos pidió que le compráramos un par de llantas para la camioneta. En todos los poblados al ver nuestros instrumentos musicales nos pedían que tocáramos y se armaban unos parrandononones que casi no llegamos a Medellín. Fue delicioso, comimos, bebimos y enamoramos hasta más no poder…”.
El cineasta David F.Muñoz realizó un bello y emotivo documental sobre el músico nariñense, en su Laguna, lugar donde discurre la vida de don Hipólito Jojoa, permitiéndonos conocer aspectos inéditos de su existencia, sus afanes, logros y sueños que le permitieron ser integrante de una de las agrupaciones musicales más representativas del departamento de Nariño.
Con el permiso del cineasta y documentalista David F. Muñoz, me permito compartir el enlace donde se puede mirar y apreciar completamente su magistral trabajo. Aquí puede observar y sentir esa nostalgia de sentirnos nariñenses y poseedores de este patrimonio musical llamado RONDA LIRICA.
Hablar con Hipólito Jojoa es revivir una de las más bellas páginas de la historia musical de nuestra región, es recordar nombres como los de Bolívar Mesa, Eliécer Argoty, Segundo Zarama, Jorge Dueñas, Segundo Vivanco, Lucio Pastrana, José Elías Muñoz, Chato Guerrero, Maruja Hinestrosa y toda una pléyade de músicos que le han dado lustre a este pedazo de la patria.
Desde siempre fue el violinista de RONDA LIRICA y con su maestría musical nos ha permitido durante décadas a los nariñenses disfrutar de los diversos sentimientos que se desprenden de su violín. De la alegría más intensa a la tristeza más nostálgica en sus vibrantes y emotivas notas musicales que nos hacen estremecer y gritarle a los cuatro vientos: “Que viva mi Pasto, ¡carajo!”.