Por: Nilza María Pantoja Agreda
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El nombre de Armando Benedetti, puede decir muchas cosas, en lo político hay que mencionar que ha pasado con gran habilidad por varios partidos como el Partido Liberal, Partido de la U, Partido Cambio Radical y finalmente la Colombia Humana, y aunque hoy por hoy es común ver este tipo de prácticas, más por estrategia que por ideología, lo cierto es que Benedetti ha sabido moverse como ningún otro en la arena política.
Ahora bien, en medio de su carrera, Benedetti ha tenido múltiples escándalos, como el más reciente: donde fue denunciado por su esposa ante las autoridades españolas por presunta violencia de género, igual situación se registró en el 2023, donde también fue denunciado por ella misma por maltrato físico y psicológico, sin embargo, su envestidura de diplomático no permitió que fuera arrestado y si hablamos de más escándalos recordemos los famosos audios filtrados, donde no dejo títere sin cabeza empezando por la consentida del presidente, la actual directora del DAPRE Laura Saravia; así como las varias investigaciones judiciales, incluyendo acusaciones de enriquecimiento ilícito, su paso como embajador de Venezuela dejo mucho que desear, y la tapa fue su nombramiento en la FAO, donde a pesar del profundo malestar que esto causó a la derecha y la izquierda, la verdad fue que su perfil profesional no encajaba para el cargo, pero lo encajaron a la brava por encima de connotados profesionales dignos de ello, pero donde manda capitán no manda marinero y el presidente contra viento y marea abrió dicha embajada que hace más de 25 años se había clausurado por sus pocos resultados, pues salvo que ustedes me digan lo contrario, a la fecha para lo que sí ha servido es para darle un sueldo al embajador que pasa los $ 49,000,000 millones de pesos pagados de su bolsillo y el mío.
Es indudable que para el actual gobierno, Benedetti ha sido un actor clave en el triunfo del presidente por su capacidad para conseguir apoyos y recursos, tema que es innegable y con quien el presidente Petro tiene una gran deuda, dejando en evidencia una relación política compleja y llena de controversias, es evidente que entre Benedetti y Petro existe una relación de, antes que necesidad, conveniencia y dependencia mutua, para los colombianos de a pie, la siempre pregunta es, por qué Petro sostiene a Benedetti con un silencio monumental en un gobierno que incluso le aposto a un ministerio de la igualdad donde una consigna es la no violencia de género? esto, es un recordatorio de cómo la política puede estar llena de alianzas incómodas y decisiones difíciles, donde la lealtad y la pragmática a menudo se enfrentan a las demandas de transparencia y ética.
Bien dicen que hay matrimonios que son de conveniencia y conozco algunos, pero en este, por más que se duerma con el enemigo, lo que no puede pasar ni por el p… es que se divorcien.” ¡Porque ahí sí, puede pasar que se caiga el otro medio gobierno!
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