Este miércoles a las 6 y 30 de la
mañana en la Clínica de la Policía falleció el capitán retirado de la Policía
Nacional, William Rodrigo Rosas Cabrera, a la edad de 79 años, informaron sus
familiares.
William Rodrigo Rosas Cabrera nació
en Sandoná el 19 de marzo de 1.939 en el hogar formado por el señor Hermógenes
Rosas y la señora Delia Cabrera. La familia Rosas Cabrera la integraron Raúl,
Jaime, William e Eylén.
en Sandoná el 19 de marzo de 1.939 en el hogar formado por el señor Hermógenes
Rosas y la señora Delia Cabrera. La familia Rosas Cabrera la integraron Raúl,
Jaime, William e Eylén.
Adelantó estudios primarios en
Sandoná y secundarios en el Liceo de la Universidad de Nariño.
Sandoná y secundarios en el Liceo de la Universidad de Nariño.
En su juventud contrajo matrimonio
con la señora Edilma Ramírez, nacida en el municipio de Santuario, Antioquia,
de cuya unión nacieron sus hijos William, Juan Pablo y Diego Andrés.
con la señora Edilma Ramírez, nacida en el municipio de Santuario, Antioquia,
de cuya unión nacieron sus hijos William, Juan Pablo y Diego Andrés.
Ingresó a la Policía Nacional y
prestó sus servicios en diferentes ciudades de Colombia. Se retiró de esta
institución luego de alcanzar el grado de capitán y con su familia estableció
su residencia en la ciudad de Bogotá.
prestó sus servicios en diferentes ciudades de Colombia. Se retiró de esta
institución luego de alcanzar el grado de capitán y con su familia estableció
su residencia en la ciudad de Bogotá.
Sus honras fúnebres se cumplirán
este jueves a las 11 de la mañana en la Capilla del Centro Religioso de la
Policía de la ciudad de Bogotá.
este jueves a las 11 de la mañana en la Capilla del Centro Religioso de la
Policía de la ciudad de Bogotá.
Nuestras voces de pesar para su
esposa, sus hijos, nietos, hermanos, sobrinos, demás familiares y amigos.
esposa, sus hijos, nietos, hermanos, sobrinos, demás familiares y amigos.
Paz en la tumba del señor William
Rodrigo Rosas Cabrera.
Rodrigo Rosas Cabrera.
Recuerdos inolvidables. Willian Rodrigo Rosas Cabrera. En nuestra niñez conocimos la escuela primaria,no sabíamos que aprendíamos, pero fueron los cimientos de nuestra adolescencia,juventud y tercera edad. Terminado el Quinto de primaria nuestros padres no sabían que hacer con sus hijos que prometían muchos triunfos, como el de mi compañero Willian.EL estudio en el Liceo de la U.de N., los otros nos matriculamos en la Gran Normal de Occidente. Desde ese entonces nos graduamos EL como bachiller académico y nosotros como Maestros Superiores.no volvimos a intercambian nada del antaño, hoy supe el fallecimiento de mi amigo Willian, todos llegamos a la tumba, sin saber donde morimos,pero si supimos el lugar donde hicimos patria. Condolencias a sus familiares y Paz en la tumba de Willian. Augusto Giraldo Cabrera Rodriguez
Recuerdos inolvidables. Willian Rodrigo Rosas Cabrera. En nuestra niñez conocimos la escuela primaria,no sabíamos que aprendíamos, pero fueron los cimientos de nuestra adolescencia,juventud y tercera edad. Terminado el Quinto de primaria nuestros padres no sabían que hacer con sus hijos que prometían muchos triunfos, como el de mi compañero Willian.EL estudio en el Liceo de la U.de N., los otros nos matriculamos en la Gran Normal de Occidente. Desde ese entonces nos graduamos EL como bachiller académico y nosotros como Maestros Superiores.no volvimos a intercambian nada del antaño, hoy supe el fallecimiento de mi amigo Willian, todos llegamos a la tumba, sin saber donde morimos,pero si supimos el lugar donde hicimos patria. Condolencias a sus familiares y Paz en la tumba de Willian. Augusto Giraldo Cabrera Rodriguez
Capi: nunca en la vida pensé, que Dios me diera el premio tan grande, de haberte tenido dentro de mis grandes amigos, afortunadamente para mi, en varias oportunidades, te manifesté el gran amor y respeto que siento por ti, hoy aquí , te reitero ese gran amor, y le doy las gracias a Díos y a ti, por ese amor de padre y amigo, que nos brindaste, a mi familia y ami.
Extrañaremos al hombre que muy claro tuvo el concepto de honestidad, franqueza, generosidad, lealtad, amistad y familia, por el resto de nuestros días, aquellas tertulias al rededor de tus hermosísimos escritos, acompañadas de estruendosas carcajadas y chanzas, que nos hacían agradables tardes enteras, al igual que los regaños, los cuales, para ser acatados, había que ser á los gritos.
Hombre íntegro, en todo el sentido de la palabra, amante de su familia, orgulloso de cada uno de sus hijos como de su gran esposa.
Que satisfacción tan grande sentimos, el haber sido tus amigos; no me queda más que decirte, en le nombre de mi familia y el mío propio… mil gracias y que Dios te tenga en su santo seno.
Antonio Ordóñez Barajas.