Visión de mujer
Por Elsy Melo Maya
elsy.ya@hotmail.com

A propósito de la Independencia de Colombia, vale la pena recordar la historia escrita y recopilada por innumerables escritores que se han esforzado por esclarecer y cimentar los verdaderos valores de la nación y sus gentes. Y en esta ocasión, haré referencia a Germán Arciniegas, con su libro: “La libertad: el destino de América” y al escritor pastuso Emiliano Díaz del Castillo: “Por qué fueron realistas los pastusos”.

El primero comenta, que aunque en Colombia se conmemora el 20 de julio por ser la fecha en que se dio el grito de independencia en Bogotá, ya con anterioridad el 3 de julio lo había hecho Cali y así mismo El Socorro el 19 del mismo mes. Por ello se tenía en otros tiempos, la fiesta del grito de los Comuneros dado en El Socorro, treinta años antes del movimiento de 1.810; si bien éste es mencionado como el año de la revolución, lo cierto es que las conocidas como “revueltas” de los Comuneros de Paraguay, Túpac Amarú en el Perú, del Socorro en la Nueva Granada y la de ”los negros de Cartagena” que van desde 1.600 a 1.700, fueron sin dudarlo desde el siglo anterior, “muestras admirables del espíritu revolucionario que animaba a las provincias”.

Pero fue hacia 1820 que empezó a circular una nueva expresión: el Pueblo Soberano, cuando hasta ese entonces, solo era soberano el rey de España. Pues bien, con la independencia, según lo cita textualmente el autor, “ahora soberana iba a ser la chusma, soberanos los infelices, soberana esa muchedumbre que se reunía en la plaza en los días de mercado, confundida con las gallinas, las mulas y los cerdos…y los campesinos que arando la tierra parecían estatuas de tierra animadas por la melancolía”.

Por su parte Díaz del Castillo, consagra que el gentilicio “pastuso”, se mencionaba de manera despectiva, queriendo pronunciar el vocablo como un reproche y una forma de desquite por parte de los descendientes de los derrotados. Que los pastusos fueron realistas y que ello fue un motivo de escándalo en su tiempo, sí, y así lo afirma con lujo de detalles con estas palabras que nos enorgullecen: “Ese gran pueblo escribió en los días de la lucha por la Independencia, la más brillante página de su historia, no por los principios monárquicos que defendieron, sino por la constancia, hazañas, proezas y generosidad con enemigos vencidos que no han sido igualadas en la historia de América. Ninguno de los pueblos de nuestro continente, incluidos los que contaban con mayores disponibilidades económicas, de elementos humanos y de armas para la lucha, fue capaz de sostener una lid tan titánica y heroica”.

Esa es la historia y este nuestro legado, que permanecerá por siempre de generación en generación.

Julio 20 de 2020

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