
Visión de mujer
Por Elsy Melo Maya
elsy.ya@hotmail.com
Nuevamente la comunidad sandoneña protesta contra la explotación de la mina El Diviso. Al parecer de manera inexplicable se autoriza su reapertura, pese a que las mismas entidades hace 2 años se manifestaron en su contra. De hecho en ese momento así nos pronunciamos por este mismo medio “Mayo 29 de 2017 Como es de conocimiento público, la cantera El Diviso es objeto de preocupación para las autoridades locales y la comunidad expuesta, como consecuencia del sistema de explotación, las pendientes del sector, el material inestable y sin consolidar, además de encontrarse ubicada en inmediaciones de la única vía que conduce a los sectores de El Maco y Alto Jiménez del municipio de Sandoná.
Por ello se solicitó la intervención de la Procuraduría Ambiental y Agraria para que con la participación de CORPONARIÑO y la Agencia Nacional de Minería, se adelantara en presencia de la administración municipal y la comunidad, una visita técnica que estableciera el real estado de la explotación y sus condiciones ambientales y de seguridad.
La Agencia Nacional de Minería, emite el Informe concluyendo entre otros aspectos, que ha existido una “inadecuada explotación por bancos ascendentes, situación que originó pendientes superiores al 75% y evidentes zonas inestables con tendencia hacia la erosión estructural…” evidenciándose “un incumplimiento histórico del Programa de Trabajo y Obras…” Se ordena al titular minero la suspensión de la explotación en determinados horarios, (medida insuficiente, toda vez que el riesgo es permanente) y realizar un plano de riesgos naturales para efectos de “definir la vulnerabilidad del sector e identificar zonas homogéneas e inestables…” Llama la atención que aunque reconoce el riesgo de la explotación y el incumplimiento del PTO, se limita a realizar recomendaciones. ¿Hasta cuándo y que debe ocurrir para que se tome una determinación definitiva?
CORPONARIÑO, iniciará “un proceso de medida preventiva consistente en la suspensión de actividades” por el incumplimiento a la Licencia Ambiental; ordena al titular de la cantera un estudio de “estabilidad de taludes que permita caracterizar y valorar posibles fenómenos de remoción en masa y desprendimiento de roca” e iniciar con la medidas correctivas tendientes a la mitigación de la amenaza existente. Es decir, que a la comunidad le asiste la razón; mantendrá el seguimiento a los resultados de las recomendaciones, para evitar que se conviertan en letra muerta y continuará exigiendo la toma de medidas contundentes que aseguren la integridad de la población que habita y transita por el sector.”
Se seguirá acudiendo a las autoridades competentes con el único fin de prevenir una catástrofe, pues ninguna medida es suficiente cuanto de salvaguardar la vida se trata.
Abril 29 de 2019