Por Augusto Cabrera Rodríguez

augusto.cabrerar@gmail.com

Cada deporte tiene en su proceso y desarrollo
un potencial  léxico que solamente el que
está inmerso en éstos entiende y le es más fácil compenetrarse en lo social y
cultural del deporte. Quien no domina la cultura deportiva y la práctica en
cada uno de ellos está sentenciado a no figurar, a no ser parte de las
oportunidades de triunfo. La cultura deportiva hace parte del acervo ancestral
de los pueblos.
Cada núcleo humano del mundo sobresale porque domina los
deportes y los hace extensivos a otras latitudes. El género humano ha recorrido
la historia debido especialmente a los deportes, en los cuales se refleja la
idiosincrasia, costumbres y demás elementos que figuran en la definición de
cultura.

Remontándonos a la historia encontramos que el fútbol es el deporte que más ha descollado en Sandoná. Las prácticas se
realizaban en las amplias calles de cada barrio con la “pelota de
trapo”, o “la vejiga de
res”,  que se inflaba con tremendos
soplos salidos de los pulmones de sus practicantes. La mayor afición al fútbol,
se centró con el tiempo en la plaza central del pueblo (hoy parque Bolívar) de lunes
a viernes, el domingo se convertía la cancha en un lugar de disputa y
demostración deportiva entre los equipos del pueblo contra los equipos
invitados de la ciudad de Pasto u otros lugares del departamento y aún de la
vecina república del Ecuador.

Jugar fútbol en esos remotos tiempos era
aglutinar a la juventud y veteranos
deportistas agrupados en el “Club deportivo Sandoná”, como progenitor
de este deporte. Sigue el tiempo y surgen muchos equipos, pero es preciso
deteneros en esta crónica al equipo de fútbol “Atlético Sandoná”,
este equipo nace de la rivalidad y deseos de encontrar entre sus integrantes
mayores oportunidades de contiendas y triunfos deportivos. Hacer comentarios
sobre el “Atlético Sandoná” es entregar parte de la adolescencia y
juventud de quien escribe estos renglones, no nos detenemos hacer un listado
anecdótico, ni dar nombres para no adentrarnos en lo recóndito de lo que cada
uno de sus jugadores y directivos representaron para la cultura deportiva de
Sandoná. Bástenos decir, que guardamos en nuestro álbum de recuerdos grandes satisfacciones y congratulaciones por lo que hizo el “Atlético Sandoná” en el devenir cultural,
deportivo y social de Sandoná.

Después de tener como centro de práctica y
competición del fútbol en la antigua plaza de mercado, centro de Sandoná, donde
existía una “pirámide” en el centro de la plaza, la cual favorecía a
los contendores; se pasó a jugar al “estadio lija” (Eduardo Arévalo),
en la actualidad plaza de mercado se lo llamó así porque en vez de gramilla las
autoridades de ese tiempo, lo rellenaban con recebo traído de las minas del
Ingenio, las raspaduras en el cuerpo, especialmente brazos y piernas eran
palpables con el sudor y la sangre.

Con el correr de los tiempos la cancha se
adaptó en el barrio Meléndez. Los deportistas en su afán de tener un nuevo
campo de fútbol acudían con hachas, machetes, picas palas, etc., para
acondicionar estos terrenos llenos de arbustos, malezas, destruir casas dejadas
por los propietarios que las vendieron al municipio. Hoy en día funciona en
estos predios la sección de primaria del Instituto Santo Tomas de Aquino. Por
último el municipio adquirió otro campo deportivo localizado en la Avenida
Centenario. Estadio que hasta la fecha sirve para concentrar a deportistas de
todas las modalidades.

Según se registra en una nota del
“Informativo del Guaco“, los concejales visitaron estas instalaciones
para hacerle las remodelaciones que demandan la modernidad. Recordemos que
Sandoná se convertirá en el centro recreacional de Nariño.

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