Dentro del Plan Integral de Reparación Colectiva (PIRC) del Resguardo Inga de Aponte, en el municipio de El Tablón de Gómez, en Nariño, se formuló un plan de trabajo que contribuya al desarrollo económico de esta comunidad que contempla, entre otras acciones, la asistencia técnica mediante la articulación y vinculación de la Federación Nacional de Cafeteros.
“En el marco de un convenio que tenemos con la Unidad para las Víctimas, nos corresponde justamente el fortalecimiento económico de las víctimas y estamos en el resguardo de Aponte, visitando una zona cafetera nueva donde el café llegó después de todo lo que la comunidad vivió y hoy se convierte en un ejemplo de construcción de paz”, manifestó Gerardo Montenegro, gerente técnico de la Federación Nacional de Cafeteros.
En cumplimiento de las medidas del PIRC, la Unidad para las Víctimas realizó la entrega de maquinaria para las actividades cafeteras en el resguardo indígena.
La directora territorial de la Unidad para las Víctimas en Nariño, Sandra Sarria Cruz, destacó: “estamos en un espacio que denota el trabajo articulado que desde nivel nacional se viene realizando con la Federación Nacional de Cafeteros y que claramente se fortalecen los procesos viniendo a territorio de manera conjunta, generando una serie de compromisos y una serie de trabajos que vamos a establecer y a continuar desarrollando en todo el marco de la construcción de paz”.
Por su parte, Hernando Delgado, director del Comité de Cafeteros de Nariño, dijo: “esta actividad es la muestra de la unidad y también del interés que tienen los caficultores de la zona por aprender cada día más de los temas del café. Este día de campo está enfocado en la calidad del café, porque los cafeteros de este resguardo quieren procesar, transformar y darle valor agregado a su producto”.
En el encuentro, el Comité de Cafeteros de Nariño, a través de su servicio de extensión, realizó actividades grupales para intercambio de experiencias, saberes y conocimientos.
Hernando Santacruz, gobernador del resguardo Inga de Aponte, destacó la importancia de este proceso de articulación y dijo: “esperamos que esta no sea la primera ni la última vez que tenemos estos espacios, que sea desde los territorios que se miran las ejecuciones de los recursos y las cosas que lleguen por articulación entre entidades”.
Con estas actividades, se benefició y aportó al mejoramiento de las prácticas de 250 cafeteros que hacen parte del resguardo indígena y desarrollan sus actividades alrededor de este producto.
“Importante la reparación colectiva que se viene dando y que ha dejado buenos proyectos para nuestra comunidad. Es el retorno a la normalidad después del conflicto que se vivió”, concluyó Fener Ordóñez, alcalde de El Tablón de Gómez.
Fuente y foto: Unidad para las Víctimas