Rincón consaqueño
Por José Rodrigo Rosero Tobar
roserotobarjoserodrigo@gmail.com
Primero de Mayo, Día Internacional del Trabajo, se conmemora con actos alegóricos de cultura y recreación, pero también con marchas, que en el caso de Colombia y a lo largo de su territorio, se endilgan comúnmente a protestar en contra de los gobiernos de turno; pero, para esta época, también las que comparten la ideología del primer mandatario, apoyando las iniciativas de cambio que probablemente no llegarán, porque las grandes oligarquías dominantes del congreso bicameral, no están permitiendo que las reformas planteadas tengan asidero en su controvertida conciencia porque seguramente perjudican los intereses de quienes ostentan el poder económico a nivel nacional.
Pero, aparte de esto, para Consacá es una fecha que no solo se debe conmemorar, sino celebrar porque precisamente un Primero de Mayo por allá en 1835, se creó la parroquia eclesiástica de Consacá.
Parroquia, palabra proveniente del latín porochía (habitar cerca), también conocida como feligresía, consiste en una división territorial de las iglesias cristianas, siendo parte de una diócesis en la organización de la iglesia católica a nivel territorial, que asigna a cada territorio su correspondiente iglesia parroquial con pueblos y sitios y con un párroco como titular.
El municipio de Consacá, hace parte de la diócesis de Pasto, la cual limita por el Este y el Sudeste, con la diócesis de Mocoa-Sibundoy; por el Sur y el Oeste, con la diócesis de Ipiales; por el Noroeste, con la diócesis de Tumaco y el vicariato de Guapi y por el Nordeste con la arquidiócesis de Popayán.
La parroquia de Consacá, hoy con el nombre de Nuestra Señora del Tránsito, primeramente hizo parte como viceparroquia de la parroquia de Matituy. El primero de mayo de 1835 fue creada como parroquia, haciendo parte de la misma en calidad de viceparoquia de Matituy a la que había pertenecido y, como dice el notable historiador presbítero Justino Mejía y Mejía, “… porque la vida de los pueblos, como la de los hombres, tiene sus altibajos, recuentos y marañas, agrias sorpresas y repentinas iluminaciones, primavera y vejez, nacer y morir, sepultarse y resucitar, Matituy que fue de las parroquias más importantes del siglo XVI que tenía por anejos a Genoy, Peñol, Mombuco, Sandoná y Consacá, decayó completamente en el segundo decenio del siglo XIX hasta el punto de pasar a ser anejo del último extremo de sus anejos el de Consacá,…”.
Aunque hemos olvidado esta fecha, tiene un significado especial para nuestra localidad, pues representa simple y llanamente, que eclesiásticamente adquiere independencia a nivel regional.
Consacá, 3 de mayo de 2024
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