Rincón consaqueño
Por José Rodrigo Rosero Tobar
roserotobarjoserodrigo@gmail.com
El origen del catolicismo se remonta a la organización de los apóstoles de Cristo para la preservación y difusión de su legado, siendo San Pedro el primer Papa que oficiara de manera universal. Esta primera iglesia varió frecuentemente hasta lograr su extensión por todo el cosmos terrenal.
La iglesia católica, como institución tiene una estructura y una cultura organizacional, basada de acuerdo a criterios de territorio, conformado por Diócesis o Jurisdicciones Eclesiásticas, Vicarías territoriales (decanatos, zonas pastorales) y Parroquias (con Capillas, si la Parroquia lo amerita en realidad).
Para el caso de Consacá, desde el primero de abril de 1880, cuando el presbítero José Ángel Delgado llegó como cura párroco del lugar, la parroquia se la conoce como Nuestra Señora del Tránsito, pues antes se la había llamado parroquia de Consacá, la que fuera erigida el primero de mayo de 1835, mediante un proceso iniciado por el hacendado Pedro Ramón de la Villota, el primero de enero de 1814, quien se dirigió al señor Obispo de Quito en procura de que Consacá fuera creada como entidad eclesiástica parroquial.
José de Cuervo y Cuervo, obispo de Quito, comisionó al Vicario de Pasto para que “mande hacer una vista de ojos” y formar un plano topográfico de los curatos de Matituy y Tambo Pintado, con numeración de todos los vecinos, pueblos y gentes que se encontraran en la parte superior y faldas del volcán.
La parroquia se erigió y abarcó hasta el río Chacaguaico en el norte, teniendo por anejos al Ingenio, Matiotuy (parroquia a la que había pertenecido hasta ese entonces), La Florida y Sandoná, agregándosele San Rafael, Cariaco y Bomboná (que eclesiásticamente habían pertenecido al partido de Yacuanquer). En abril de 1835 se le designó como cura interino a Mauricio Buendía de la Villota, convirtiéndose en el primer sacerdote que ofició en esta localidad.
Pasó la Semana Santa. Con gran complacencia miré como el fervor católico sigue intacto en el lugar y que incluso en los sitios más remotos de esta área comarcal, se la celebra con verdadera majestuosidad.
Consacá, 5 de abril de 2024