En las últimas semanas se presentaron deslizamientos de terreno en la vereda Las Delicias, corregimiento de San Miguel, municipio de Sandoná y el más reciente empezó a afectar la estructura del trapiche del señor Libio Rosero.
Las áreas de las bagaceras, del horno y de la sala de moldeo ya tienen grietas y fisuras. Los propietarios empezaron a utilizar llantas para tratar de contener una parte del trapiche, sin embargo el movimiento de la tierra se llevó estos elementos que en otras circunstancias sirven de contención.
El deslizamiento del terreno que queda enseguida del trapiche es tan fuerte que desprendió de raíz un árbol de gran tamaño y amenaza con llevarse otros dos.
El camino por donde llegan los caballos cargados de caña para beneficiarla en el trapiche, de igual manera empezó a ceder hacia abajo.
La semana pasada se presentaron deslizamientos a unos pocos metros del trapiche, que incluso lo sintieron en el sector urbano de Ancuya, que está al frente, al occidente al otro lado del río Guaitara.
Libio comentó que cuando se presentan los deslizamientos además del ruido característico de la tierra que se va ladera abajo, se escucha un bramido de la tierra, como lo escuchó Nubia Rojas en la vereda Chávez el pasado domingo en horas de la noche.
Entrevista con Libio Rosero.
La vereda Las Delicias está ubicada en el costado occidental del corregimiento sandoneño de San Miguel, muy cercana a la vereda El Anil, que llega al río Guaitara.