El despertador del sur
Por: Jorge Arturo Bravo
despertadordelsur@hotmail.com
Cuando poco a poco en nuestro medio se va avivando la llama de la política, ya se empieza a escuchar el “chirriar” de las maquinarias, pues por todas partes se oye que desde la entidad ubicada en el Parque Infantil, la que Berner Zambrano, por ejemplo, ama tanto, que prácticamente casi la lleva a su desaparición, precisamente por la politiquería que allí se ejerce, según el decir de varias personas, desde su interior ya tienen prácticamente armada toda la maquinaria para ayudar al citado candidato a la gobernación de Nariño.
Lástima que esto suceda no solo en Pasto sino en todas las ciudades colombianas, notándose mucho más en nuestro medio por la poca población comparada con las grandes capitales del país; vergonzoso que haya funcionarios que para mantener el puesto se conviertan en los “directores de orquesta”, para dirigir, desde el escritorio, cómo deben actuar los empleados para ayudar a X candidato.
Pero esta situación anómala para la democracia colombiana, digna de la más exhaustiva investigación, no es de ahora, no, ha sido de toda la historia, especialmente después de la promulgación de nuestra Constitución, el 4 de julio de 1991, empleados sometidos y amarrados con su voto y el de sus familiares cercanos, “nos tocas apoyar porque si no aportamos con los 20 votos exigidos, nos vemos obligados a perder el puesto y no queda otro camino aceptar lo que la “jefe” nos pide” – dicen.
Y lo malo es que, para no quedarse sin puesto, nadie se atreve a denunciar a esta clase de funcionarios, y en esta crisis de desempleo tan grande que sufre Pasto y Colombia toda, pues no queda más que “mantener el pico cerrado” y aguantar; situación que, desde todo punto de vista, rechazamos y que sea una alerta para las autoridades de vigilancia como las Procuradurías, dígase Provincial, Regional y Nacional.
Nota: Sospechoso lo ocurrido con el candidato Nicolás Toro Muñoz, el pasado viernes, cuando al inscribirse ante la Registraduría, del computador se había borrado todo el trámite de inscripción, que una y varias veces se cayó el sistema, teniendo el candidato que hacer nuevamente toda la tramitología necesaria para su inscripción que finalmente se pudo hacer.
