Por J. Mauricio Chaves-Bustos
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Si se analizan los resultados de la convocatoria desde la distribución de los recursos destinados a los ganadores por municipio, todavía ésta sigue siendo injusta e inequitativa, ya que el 40% de los seleccionados, es decir 122 de un total de 305, corresponden a la ciudad de Pasto. Esto llama poderosamente la atención, ya que por parte de la Dirección Administrativa de Cultura de Nariño no se ha logrado una participación efectiva de artistas o gestores de los 64 municipios que conforman el departamento, 5 de los cuales no presentaron ninguna propuesta, y resultando ganadores representantes de 49 municipios, es decir que 19 municipios quedaron por fuera.
De las 1173 propuestas presentadas, 512 corresponden a Pasto, 88 a Ipiales, 47 a Tumaco, número que se va reduciendo a medida que se alejan del centro, algunos de los municipios de la costa nariñense o de la zona de cordillera presentaron solo un proyecto o dejaron de hacerlo. Como mencionamos ya, pero repetimos para dimensionar la preocupación que nos asiste, de los 305 seleccionados, 122 son de Pasto, seguido por 24 de Ipiales, 17 en Tumaco, 12 en Túquerres, 10 en Nariño, 10 en Pupiales, y el resto va reduciendo hasta llegar a la cifra mínima.
Si hacemos el análisis por líneas, hay inequidades tan grandes como la de investigación y o creación artística, 60 estímulos para Pasto, 12 para Ipiales y la mayoría con 1 solo estímulo; o en los estímulos concertados para la paz y la vida, de un total de 11 ganadores en 4 municipios, 8 son para Pasto, entre estos el Fondo Mixto de promoción de la cultura y las artes de Nariño, curioso que una entidad como esta se presente a esta convocatoria, cuando otrora era generadora de recursos y de apoyo a importantes emprendimientos culturales en el departamento.
El año pasado, por sugerencias del Consejo Departamental de Cultura y de artistas y gestores, se logró que la convocatoria se regionalizara, precisamente para evitar que la mayoría de los recursos queden concentrados en una sola ciudad. En 2023 se distribuyó 2 mil millones en 318 propuestas. Este año, 2024, se distribuirán 2 mil 710 millones entre 305 ganadores, es decir que aumentó el recurso, pero disminuyó el número de propuestas ganadoras.
Dentro de los análisis que venimos haciendo, está el hecho de cómo está planteada la convocatoria, per se excluyente, ya que no es posible que se haya perdido la regionalización. En el seguimiento que se ha hecho a la convocatoria, resalta que sean artistas y gestores residentes en la ciudad de Pasto los que más se beneficien, obedece esto a factores estructurales de lo que vengo llamando “el pastocentrismo”, lo cual desde luego no recae sobre los artistas o gestores que ahí habitan, ¡para nada!, en hora buena por ellos que tienen la posibilidad de participar en esta convocatoria y en la que organiza la Alcaldía de Pasto. Lo estructural viene mediado por la forma en que nos hemos construido como departamento, con una mirada desde el centro que pareciera no determinar o excluir las periferias, generando todas las posibilidades y oportunidades para el centro en detrimento del resto.
No es posible que la convocatoria no tenga en cuenta de fondo los enfoques diferenciales, tanto étnicos, de género, etarios y hasta regionales; no es posible que se ponga en las mismas condiciones a un artista que vive en un municipio donde no hay interconectividad constante, donde no hay universidades o escuelas de formación, donde las condiciones sociales son complejas, con un artista que ha tenido la oportunidad de estudiar, de tener doctorados y hasta posdoctorados, no solamente en Colombia sino también en el exterior. No es posible que, por ejemplo, en los estímulos concertados para la paz y la vida, se direccionen o se pongan condiciones en donde de antemano se sabe que en muchos de estos municipios los participantes no cumplen con ciertas condiciones. Por eso digo antes que la convocatoria es per se excluyente.
El solo hecho de focalizar algunos lugares para socializar la convocatoria hace que muchos artistas y gestores o no la conozcan o se abstengan de participar por los requisitos que se piden, muchos de ellos fáciles de conseguir y de gestionar en una ciudad, pero complicados hasta el punto de volverse imposibles en territorios donde las lógicas administrativas son complicadas y los elementos logísticos una curiosidad. Con todo respeto, pero que bueno sería que dejaran el escritorio por unos días y se dedicaran a recorrer de verdad este Nariño recóndito.
Los resultados arrojados por esta convocatoria hacen que sea necesaria una reflexión profunda para que en 2025 la convocatoria sea mucho más justa y equitativa con los artistas y gestores de los 64 municipios que conforman nuestro departamento, para muchos de los cuales es el único estímulo que reciben en un año. Para ello es necesario hacer mesas de trabajo culturales en las subregiones, ponernos en diálogo constante y escucha permanente para permitir una mayor participación y una distribución equitativa de los recursos que ahí se destinan. Que el verde de todos los colores no sea un cliché más y que realmente entendamos que nuestra morada al sur es una gran casa y no la de unos pocos.
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