Visión de mujer
Por Elsy Melo Maya
elsy.ya@hotmail.com
“No ha muerto. Ha iniciado un viaje atardecido. De azul en azul claro-de cielo en cielo-ha ido por la senda del sueño con su arcángel de lino.” (Gabriel García Márquez)
Es usual preguntarnos: ¿es la pérdida de un ser amado, el final de todo o solo el principio de algo más?, por la fe que nos asiste, comprendemos que la muerte es un proceso de la vida, es trascender para unirse a la fuente creadora, es el inicio de un nuevo ciclo, donde no hay dolor ni sufrimiento, es el proceso evolutivo del alma. Y podemos cambiar ese temor natural, considerando que es un estado transitorio y no uno de pérdida, logrando así que nuestro corazón intente blindarse del dolor de esa ausencia física y entonces poder honrar este proceso como hoy lo hago en honor a nuestro padre Alberto Melo Saavedra, nuestro orgullo eterno, acompañados por su esencia: su amor, sus recuerdos, sus palabras, sus dichos, sus consejos, sus abrazos y su generosidad, su inteligencia y claridad mental, su capacidad de ver lo que otros no podían ver, en fin, su legado, ese que nos conecta sin importar tiempo ni espacio.
Y qué mejor que conmemorar los dos años de su pascua, con un episodio de gran recordación en Sandoná, su tierra, ocurrido el 26 de julio de 1978 y que hace parte de su biografía: “Dentro de las actuaciones del Comité Cívico Popular, vale recordar con especial referencia, que ante los atropellos recibidos por parte de la oficina local y departamental de la Empresa Cedenar, con el liderazgo de su presidente, Alberto Melo Saavedra, un hombre de pensamiento liberal, defensor de las causas justas y sobre todo de la clase menos favorecida, con la templanza característica de un líder imbatible, se iniciaron las reclamaciones de rigor ante las directivas de dicha empresa… Ante la negligencia evidente de las directivas de Cedenar de ese entonces y frente al justo reclamo y la inconformidad generalizada, se convocó a una Asamblea General con la participación de un incalculable número de ciudadanos que finalmente terminó en una manifestación sin precedentes.”
Por los daños causados a la oficina de Cedenar por personas ajenas al Comité Cívico, fueron capturados aproximadamente 30 de sus integrantes, entre ellos mi padre, acusados de asonada. “Fueron maltratados físicamente en las instalaciones de la policía y luego puestos a disposición en los calabozos de la localidad por varios días, hasta cuando intervino el propio gobernador de Nariño ante las peticiones de la ciudadanía que los respaldaba y un juez de la república declaró que las acciones no constituían asonada y en consecuencia fueron dejados en libertad.” Cedenar reconoció los errores y reorganizó el sistema tarifario y “desde la Presidencia de la República se envió por solicitud del Comité Cívico, un delegado que se reunió con varios municipios del departamento para escuchar las quejas y reclamos sobre diferentes temáticas sociales”.
Este fue mi padre. ”Llevo tu corazón cerca del mío y al sentir una repentina ráfaga de viento, sé que eres tú dándome una señal que sigues conmigo”.
Junio 3 de 2023