Por Héctor
Emiliano Cabrera
Emiliano Cabrera
hemica@gmail.com
Empezaba el año
1969 y, después de haber resultado aptos en los exámenes previos (diciembre de
1968) en el Batallón Batalla de Boyacá, fuimos convocados, en el mismo
Batallón, para el mes de enero y de allí nos trasladaron al Grupo Cabal de
Ipiales, con el propósito de cumplir el periodo de instrucción militar
hasta el juramento de bandera.
1969 y, después de haber resultado aptos en los exámenes previos (diciembre de
1968) en el Batallón Batalla de Boyacá, fuimos convocados, en el mismo
Batallón, para el mes de enero y de allí nos trasladaron al Grupo Cabal de
Ipiales, con el propósito de cumplir el periodo de instrucción militar
hasta el juramento de bandera.
Habíamos
bastantes bachilleres del departamento, entre ellos seis sandoneños y uno de
Ancuya. Los sandoneños éramos: Jaime Rosero (QEPD), hijo de don José Félix
Rosero y doña Teresa Fajardo; Pedro Miller Caicedo Meza, hijo de don Pedro
Caicedo y de doña Nohemí Meza; Ramiro Chamorro Arcos, sus padres eran don Jorge
Chamorro Santacruz y doña Bertha Arcos; Pedro Edmundo Cabrera Meza, hijo de don
Pedro Cabrera y de doña Emperatriz Meza, hermano del profe Rolando Cabrera,
José “Pepe” Pantoja Fajardo, hijo de don Enrique Pantoja y de doña Berenice Fajardo y Héctor
Emiliano Cabrera Cabrera, hijo de Emiliano Cabrera Enríquez y Macaria Cabrera. El
compañero de Ancuya se llamaba Pedro Caicedo, muy buen compañero y amigo.
bastantes bachilleres del departamento, entre ellos seis sandoneños y uno de
Ancuya. Los sandoneños éramos: Jaime Rosero (QEPD), hijo de don José Félix
Rosero y doña Teresa Fajardo; Pedro Miller Caicedo Meza, hijo de don Pedro
Caicedo y de doña Nohemí Meza; Ramiro Chamorro Arcos, sus padres eran don Jorge
Chamorro Santacruz y doña Bertha Arcos; Pedro Edmundo Cabrera Meza, hijo de don
Pedro Cabrera y de doña Emperatriz Meza, hermano del profe Rolando Cabrera,
José “Pepe” Pantoja Fajardo, hijo de don Enrique Pantoja y de doña Berenice Fajardo y Héctor
Emiliano Cabrera Cabrera, hijo de Emiliano Cabrera Enríquez y Macaria Cabrera. El
compañero de Ancuya se llamaba Pedro Caicedo, muy buen compañero y amigo.
En Ipiales se
nos unieron muchos bachilleres más, de Ipiales y de la exprovincia de Obando,
del norte de Nariño y del departamento del Cauca.
nos unieron muchos bachilleres más, de Ipiales y de la exprovincia de Obando,
del norte de Nariño y del departamento del Cauca.
Recuerdo a un compañero de Ipiales, de apellidos
Hernández Hernández, a quien después me lo encontré en Sandoná, en unas
vacaciones, desempeñándose como Juez Municipal, por allá en los finales de la
década del 70, época en la que Pedro Edmundo Cabrera Meza, también ocupaba el
cargo de Juez en el otro Juzgado de Sandoná, con quienes celebramos el
encuentro con todas las de la ley y al siguiente año me acompañaron en la
celebración de la Primera Comunión de mi hijo mayor Héctor Albeiro.
Hernández Hernández, a quien después me lo encontré en Sandoná, en unas
vacaciones, desempeñándose como Juez Municipal, por allá en los finales de la
década del 70, época en la que Pedro Edmundo Cabrera Meza, también ocupaba el
cargo de Juez en el otro Juzgado de Sandoná, con quienes celebramos el
encuentro con todas las de la ley y al siguiente año me acompañaron en la
celebración de la Primera Comunión de mi hijo mayor Héctor Albeiro.
Cumplidos los
dos meses de instrucción, fuimos trasladados al Batallón Batalla de Boyacá, de
donde nos repartieron para hacer labores de alfabetización, o de colaboración,
en las escuelas de la región, durante tres meses.
dos meses de instrucción, fuimos trasladados al Batallón Batalla de Boyacá, de
donde nos repartieron para hacer labores de alfabetización, o de colaboración,
en las escuelas de la región, durante tres meses.
A todos nos
daba pena que nos tocara en Sandoná, porque no queríamos que nos vieran
vestidos de soldados y un fin de semana que me dieron permiso para ir a visitar
a mi familia, se había hecho la repartición de escuelas en el Batallón y mis
compañeros se ubicaron en las escuelas veredales dejándome a mí la
Concentración Escolar.
daba pena que nos tocara en Sandoná, porque no queríamos que nos vieran
vestidos de soldados y un fin de semana que me dieron permiso para ir a visitar
a mi familia, se había hecho la repartición de escuelas en el Batallón y mis
compañeros se ubicaron en las escuelas veredales dejándome a mí la
Concentración Escolar.
Cuando llegué el lunes ya estaba todo consumado y
me tocó ir a ponerme a las órdenes del Profesor Sergio Elías Erazo, quien me
apoyó en todo y me permitió ir a dar clases con ropa de civil. Entre mis
alumnos recuerdo bastante a Roberto Coronel, quien fue elegido alcalde de
Sandoná para el período 2005 – 2007.
Este es un espacio de
opinión destinado a columnistas, blogueros, comunidades y similares. Las
opiniones aquí expresadas pertenecen exclusivamente a los autores que ocupan
los espacios destinados a este fin por el blog Informativo del Guaico y no
reflejan la opinión o posición de este medio digital.
-
-
-
-
-
