¿Por qué la frustración de la gente con la política?

Spread the love

Tomado de www.las2orillas.co

El 9 de febrero de 2.014 Juan Manuel
Ospina entrevistó al profesor Michael Sandel para tratar temas relacionados con
la política, la ética, la economía, el mercado, la participación y la democracia, para el portal de Las 2 Orillas,
que están vigentes.

¿Por qué la frustración de la gente
con la política?
Michael Sandel el profesor más
famoso en la historia de la Universidad de Harvard, cuya cátedra tiene más de
10 millones de visitas en youtube estuvo en Colombia presentando su libro Lo
que el dinero no puede comprar recién traducido al español y publicado por
Random House Mondadori. En esta
entrevista con Juan Manuel Ospina, Sandels da claves para entender el
comportamiento electoral colombiano y la crisis del mundo actual que para el es
ante todo una crisis ética.
JMO. ¿Considera que en la raíz de la
actual situación mundial se encuentra 
una crisis ética y no simplemente económica?
MICHAEL SANDEL. Si, considero que es
así. Hoy en las democracias, de manera
generalizada, se presenta una gran frustración e insatisfacción de los
ciudadanos con la política, con los partidos y los políticos. La razón de esa
insatisfacción es que el discurso político perdió su significado moral
.
Hemos perdido la habilidad para discutir y debatir grandes cuestiones
éticas, y ello en razón a que en las últimas tres décadas ha dominado el
pensamiento económico y se impuso la
lógica de mercado, con el consiguiente olvido de la importancia que para la política tienen los debates éticos.
JMO. 
Al reconocer  la  estrecha relación existente entre ética y
política, ¿considera que  hoy la economía
ha desplazado a la política del puesto de mando de la sociedad?
SANDEL Sí. Diré que en los años
recientes la economía desplazó de ese
puesto a la política democrática
, al tiempo que el pensamiento económico
sustituyó al debate ético como centro de atención de la política.
JMO. ¿El debate ético es un debate
político?
SANDEL Sí. Las cuestiones éticas
importantes que debemos debatir en el ámbito de la política son la Justicia, el Bien Común y las obligaciones
recíprocas de los ciudadanos entre sí
. Esas son las tres cuestiones éticas
fundamentales y por ello deben ser las
cuestiones centrales del debate político que han de adelantar las sociedades democráticas.

JMO. ¿Hay espacios de la vida
personal y social que hoy escapen a la lógica del mercado?
SANDE. Hay muy pocas cosas que hoy
el dinero no pueda comprar; entre esas cosas buenas se encuentran el amor, la
amistad, la vida familiar
. Pero aún en esas áreas de la vida, de las relaciones
personales y  la vida familiar, el dinero
y la mentalidad de mercado cada vez están más presentes. Un ejemplo claro al
respecto es el alquiler de vientres,
resultado del espíritu mercantil, del pensamiento de mercado que se hace
presente en algo que es propio  de la vida de familia, de la vida íntima de
las personas.
JMO. Un asunto de amplias
connotaciones éticas que se debate  acá y
en general en América Latina, ligado no a la vida privada sino a la de la
sociedad, es el relacionado con la industria minera internacional, con la preservación
del medio ambiente y el afán de la gran minería de obtener rápidamente
inmensas  utilidades, sin mayor
consideración a los intereses del país dueño del recurso. Igualmente se discute
la mercantilización, la comercialización de la política (“el clientelismo”)

que  destruye el escenario político y ha
puesto a los partidos en una condición 
de ilegitimidad.
SANDEL. Son unos  muy buenos ejemplos de dos grandes e
importantes áreas de la vida pública que requieren un debate ético, pues  no son solo cuestiones económicas, son
también éticas, relacionadas con la Justicia y el Bien Común. Por ello,
necesitan ser debatidas como cuestiones éticas. Cuando se discuten y analizan
asuntos relacionados con el medio
ambiente o con las condiciones de los trabajadores, por ejemplo, se hace como
si fueran solamente técnicos o
económicos y se olvida que  su  discusión es importante precisamente porque plantea interrogantes fundamentales sobre  la justicia, la igualdad y la desigualdad,
sobre el bien común
.
JMO. ¿En el corazón del debate
ético, está la  participación de los
ciudadanos?
SANDEL El asunto más importante de
los ciudadanos en una democracia es tener voz
, una voz reconocida para debatir
los asuntos propios de los valores y la ética. Frecuentemente la política no
nos permite debatir los valores o las
cuestiones éticas que subyacen en las
políticas públicas que se discuten.
JMO. ¿Cuándo Ud. habla de política,
se refiere al papel del Estado, del poder político?
SANDEL. No solo el papel del Estado.
Cuando se habla de política, se la aborda en dos niveles; el de las políticas públicas y la leyes elaboradas por el Estado y, en segundo lugar,
el de la voz de los ciudadanos que depende de las oportunidades que tengan  para
participar
en un debate pertinente sobre
los asuntos relativos a los valores, la
justicia y el bien común.  Hoy en las democracias, la política se ha
circunscrito a lo referente al Estado, dejando de lado lo que tiene que ver con
la gente. A eso me refería cuando hablé del vacío que  existe 
en el discurso público.
Cada vez es menor la conexión
existente entre la participación de los ciudadanos y la formulación por el
Estado de las políticas
. Por ello, las discusiones en las campañas y en las
elecciones se han limitado a asuntos 
meramente tecnocráticos y de manejo, y no a las cuestiones éticas.
Esta situación que ya es hoy un problema, puede llegar a transformarse en  una crisis mundial de las sociedades
democráticas, desatada por la aceptación acrítica de la
dominación del pensamiento de mercado, que se presenta a si mismo como neutro respecto a valores y cuestiones
éticas, como un medio técnico, científico adecuado para decidir sobre las cuestiones de política pública – el medio ambiente, las regulaciones
laborales…-.
Pero la realidad es otra porque el
pensamiento económico, la racionalidad
de mercado descansa en ciertos valores y
supuestos éticos que no solemos confrontar, cuestionar. Por esa razón, el
propósito con mi libro “Lo que el dinero no puede comprar” es inspirar y
estimular un tipo de debate público que
mejore al actual, al abordar más directamente las cuestiones de ética y
valores, de justicia y del bien común;
un debate liberado de su dependencia acrítica del pensamiento y la razón de mercado; el error ha sido considerar que ese pensamiento de mercado por
si solo pueda definir el bien público.

JMO. 
¿En la sociedad actual, donde se
consolidó el poder del dinero para comprarlo todo
, la desigualdad económica
entre los ciudadanos juega un papel central?
SANDEL. Entre más cosas pueda
comprar el dinero en una sociedad, más
incide en ella  la desigualdad económica
.
Si el dinero y los mercados determinaran
únicamente quien tiene acceso a bienes de lujo – carros, vacaciones… -, la
desigualdad no importaría mucho, pero en la mayoría de las actuales sociedades,
el dinero determina el acceso a aspectos esenciales de una vida decente, de una
buena vida – el acceso a una atención médica decente, a educación, a la
posibilidad de tener una voz crítica e
influencia en la sociedad… -, no solo a los bienes de lujo. Cuando el dinero gobierna esas cosas fundamentales,
debemos preocuparnos por la desigualdad.
JMO. Oyéndolo, quisiera 
preguntarle si sus clases no son realmente un verdadero debate democrático en las cuales, dentro de la mejor tradición socrática, pone
a sus estudiantes a discutir, a que descubran en sus propias
experiencias de vida
, los valores que están implícitos en el 
pensamiento y la operación del
mercado en el cual participan.
SANDEL La metodología que empleo
para dar mis clases y para escribir el libro, usar historias para plantear dilemas éticos, tiene como propósito invitar a alumnos y lectores a pensar por sí
mismos sobre los valores y
principios que están implícitos en sus convicciones. El debate en el salón de
clase permite mostrarles a los
estudiantes lo que puede y debe ser un discurso público y democrático
. Posteriormente empezamos a colocar los videos de las clases “on
line”  para permitir el acceso libre y abierto al curso – tres millones de personas escuchándolo
en YouTube, decenas de millones gracias a sus 
presentaciones en otras lenguas distintas del inglés -. La reflexión que en él se hace, atrae a un público más amplio que los
solos estudiantes de mi curso en Harvard; nunca 
imaginé que al permitir el acceso libre a mis conferencias
universitarias sobre Filosofía, estas interesaran a tanta gente en el mundo.
Pienso que la explicación está en que relaciono los temas abstractos de la
Filosofía con la vida, con hechos de la cotidianidad, para
conectarlos con el mundo en que se vive.
JMO. ¿No cree que su manera de
abordar las cosas, la vida,  de trabajar los problemas, tienen una semejanza con la forma en que Adam
Smith realizó sus análisis y reflexiones?
SANDEL.  Adam Smith que era  filósofo, consideraba que la Economía estaba conectada con la Filosofía Política.
Hoy la Economía se ha separado a sí misma de la Filosofía y ha tratado de
establecerse como un campo de conocimiento neutro en términos de valores,
desligado de la Filosofía Política y Moral. Con mi  trabajo académico busco dos objetivos.
Primero, estimular e inspirar un mejor tipo de discurso público. En segundo
lugar, tratar de cambiar la enseñanza y
comprensión de la Economía, para
reconectarla con la Filosofía
.

JMO. ¿Cómo estableció su pedagogía?
SANDEL. La idea de plantearles
preguntas a mis alumnos y alentarlos a responderlas, nació de mi experiencia
que como estudiante de Ciencia Política tuve cuando tomé cursos de Filosofía y no  la 
entendí
, me parecía muy
abstracta. Estaba interesado en la política, en el mundo concreto y en el
debate contemporáneo y no entendía ni veía la conexión entre esos intereses
y la Filosofía que percibía además de abstracta, lejana de la vida. Dejé de lado la Filosofía y concentré mi
interés en la política.
Durante el doctorado en Oxford le
volví a dar una oportunidad a la Filosofía Política con la idea de regresar
luego a temas más prácticos, la Ciencia
Política y la Economía. Acabé
estudiándola cuatro años y me enamoré de ella. Empecé a enseñarla en Harvard y
quise hacerlo de una manera diferente a
como fue mi experiencia, buscando conectarla con la vida para interesar a los estudiantes en su estudio,
para lograrlo busqué involucrarlos en discusiones sobre asuntos concretos
para  relacionar las ideas y principios
filosóficos con la vida y las experiencias cotidianas y con el mundo
. Mi método
de enseñanza nació pues de  recordar lo
que era ser un estudiante tratando de entender Filosofía.

Fotos: Cortesía Las 2 Orillas

Nota original:

https://www.las2orillas.co/por-que-la-insatisfaccion-de-los-ciudadanos-con-la-politica-con-los-partidos/?fb_action_ids=10202153960223353&fb_action_types=og.likes&fb_ref=.UvjNM3MTOls.like&fbclid=IwAR0Emi5zmG0AsxzP7llthXKO66xFUTzmn5vSwnlj8J8N_4UoHWilVIQ6M20

Author: Admin

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *