Por Jesus Armando Eraso Yela*
Facebook: chucho.eraso
La subregión de occidente es de las más pequeñas del departamento, está conformada por cuatro municipios, es una de las más cercanas a la capital, es en donde se cultiva uno de los mejores cafés del mundo y desde donde se despacha una gran cantidad de panela que se distribuye y se consume en gran parte del país. Es una subregión de riquezas enormes, pero también es una de las más atrasadas en ámbitos generales como vías y desarrollo agropecuario.
Con el inicio de los diálogos subregionales por parte de la Gobernación que dirige Luis Alfonso Escobar, de cara a lo que será el plan de desarrollo del departamento de Nariño, empieza nuevamente a tomar importancia las apuestas que se deben materializar en esta subregión que la conforman los municipios de Linares, Ancuya, Sandoná y Consacá.
Yo soy oriundo de esta región y durante los cuatro años de mi desempeño como Diputado del departamento no solo me convertí en su vocero, sino que me dediqué a recorrer y estudiar las grandezas y problemáticas de esta bella parte de nuestra región. Con base en lo anterior me permito, a través de esta columna de opinión, exponer las que considero deberían ser las grandes apuestas mancomunadas que necesitamos que se materialicen en la subregión, muchas de las cuales iniciamos en los pasados 4 años, y muchas otras que necesitan voluntad política y trabajo en equipo.
“Necesitamos planear más allá de los mandatos”
La subregión de occidente, curiosamente, siempre ha tenido amplia representación política en los gabinetes, en la Asamblea y en los diferentes escenarios departamentales. Ha sido una región políticamente activa y quizás de ahí emana su falta de planeación, pues como actores políticos muchas veces caemos en el error de estar enfocados en demostrar lo que hace cada uno por su cuenta, al margen de pensar en planear más allá de los mandatos.
La subregión de occidente debería tener una planificación de cara al futuro, al menos de cara al año 2050, donde de la mano de la comunidad, todos los actores políticos, sociales, culturales y demás tracen líneas claves que permitan que nos pongamos de acuerdo en aspectos fundamentales como que corredores viales priorizar, los cuales deberán ser materializados por los mandatarios de turno, sin importar quien sea o a que partido político pertenezcan.
Hace cuatro años la subregión contó con la representación departamental de dos diputados, dos miembros en el gabinete y los cuatro mandatarios/a locales y siendo francos nos costó mucho entendernos en medio de nuestras diferencias. Tuvimos que enfrentarnos a uno de los inviernos más difíciles que ha golpeado la región para entender que nos necesitábamos los unos a los otros y que debíamos dejar a un lado nuestras diferencias. Al final el balance no fue malo, pues en una visión amplia no solo salimos victoriosos de la crisis, sino que además se lograron importantes inversiones y se avanzó en la pavimentación de al menos 10 kilómetros de vía en diferentes partes de la subregión.
En el presente esa representación recae en un diputado, dos asesores de despacho y los cuatro mandatarios/a municipales, a quienes les invito a trabajar de la mano y darle continuidad a la apuesta que denominamos “Todos unidos x el Occidente” que no solo nos permitió unificar voces, sino que también nos permitió hacer seguimiento a los acuerdos y compromisos trazados. Es hora de pensar en planear más allá de los mandatos, que bueno que en estos cuatro años esa iniciativa se empiece a materializar de cara al futuro subregional.
“Sin vía no hay progreso”
La subregión de occidente cuenta con un amplio retraso en material vial, en el presente solo se encuentran pavimentados los corredores Pasto – Sandoná y Sandoná – Consacá, se encuentran en pavimentación 4.6 kilómetros de Ancuya al Puente Eduardo Santos y 3.3 kilómetros desde Linares al corregimiento de San Francisco, en la vía que conduce a Ancuya. También se pavimentó 2 kilómetros de Linares al corregimiento de La Laguna en la vía que conduce a Sandoná a través del puente México.
Lo anterior quiere decir que aún falta mucho por hacer en materia vial, esta quizás debe ser la apuesta prioritaria en estos cuatro años y de aquí al futuro. La subregión panelera y artesanal debería contar con una vía circunvalar que conecte a los cuatro municipios con Pasto, pudiendo ser así un gran catalizador del turismo y del desarrollo agropecuario que permita a propios y extraños conocer las grandezas del Guaico.
Para lo anterior existen avances importantes, pues en el periodo pasado se dejó listo el tema de los estudios y diseños de la vía que conduce de Linares a Sandoná a través del puente México. Sin duda un gran avance que agiliza y facilita casi que en un 50 por ciento que los anhelos de los guaicosos se empiece a materializar. Será labor de congresistas, alcaldes, diputados, miembros del gabinete y el señor gobernador lograr conseguir los recursos para lograr dicho fin. De cara a lo anterior he visto con mucho juicio como los alcaldes de Linares y Sandoná andan trabajando en equipo, importante que los otros actores políticos los rodeen de cara a lograr dicho objetivo.
Otros temas importantes en materia vial son:
- Avanzar en los estudios y diseños de los otros corredores viales de la subregión.
- Tras la entrega de los estudios de riesgo se deberá determinar qué se hará con la falla geológica en el sector de Roma Chávez y presentar alternativas de solución frente al trazado vial.
- Revisar la estabilidad del puente amarillo en la vía Ancuya – Consacá.
“Del turismo, reubicaciones y otras prioridades”
Como toda subregión, el occidente requiere inversiones en todos los ámbitos, y también existen retos a los cuales se les debe dar prioridad. Hace unos días la alcaldesa de Ancuya recibió por parte de la UNGRD el resultado de un estudio de riesgo que determinó que un total de 31 casas deberán ser reubicadas del sector denominado “calle primera”, tras la fuerte ola invernal que golpeo a la subregión. Supremamente importante que se actúe en bloque y no se deje a la alcaldesa sola en este propósito, pues requerirá asistencia directa del gobierno departamental.
Otra gran necesidad que se tiene en la subregión es el de potencializar el turismo en los otros municipios más allá de Sandoná, el cual sin duda se ha convertido en un foco del mismo a nivel regional. El alcalde Byron Zambrano ha determinado apostarle a la materialización de la ciudad región, cosa que comparto, pero que también lo compromete a ser subsidiario con los otros municipios del Guaico para que los mismos también se conviertan en receptores y beneficiarios del amplio flujo de turistas que cada día visitan más la subregión. Para lo anterior será importante contar con un relato, con una historia y una oferta de experiencias, similar a la que hoy ofrece el eje cafetero, pero que en nuestra subregión gire en torno al café, a la iraca, a los trapiches y la panela.
De igual manera hay otras prioridades a tener en cuenta, sobre todo en materia de gestión de riesgo, pues la presencia del monocultivo de la caña ha erosionado los suelos, lo que genera que en invierno y verano se presenten amplias afectaciones, ya sea por incendios forestales o por deslizamientos o movimientos en masa. Importante fortalecer la capacidad bomberil de los 4 municipios.
Para terminar: en el tema de la paz que tanto enfoque hace el señor Gobernador, Ancuya y Linares merecen estar dentro del mapa de las apuestas de paz, y por ende dentro del radar en materia de inversión que permita su materialización. Los guaicosos merecemos vivir en paz y para ello todos estamos dispuestos a ayudar.
*Profesional en Gobierno y Relaciones Internacionales, especialista en Finanzas Públicas, egresado de la maestría en Desarrollo Económico y Diputado del Departamento de Nariño en el Periodo 2020-2023
Redes sociales: @jesuseraso51
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