Por Jorge Mideros Rosero
mide51@yahoo.es
Aparicio Mideros Zambrano y Clara Estrella
ambos pastusos, él mecánico y ella panadera de tradición se casaron y se fueron
a vivir a Sandoná a inicios del siglo 20; allá tuvieron a sus hijos Rosario,
Marco Tulio y Baltazar Mideros Estrella que nace un 14 de Noviembre de 1914.
Gozaban de sus labores realizadas en su casa, allá en la carrera 6ª con calle
7ª, esquinera para más señas.
ambos pastusos, él mecánico y ella panadera de tradición se casaron y se fueron
a vivir a Sandoná a inicios del siglo 20; allá tuvieron a sus hijos Rosario,
Marco Tulio y Baltazar Mideros Estrella que nace un 14 de Noviembre de 1914.
Gozaban de sus labores realizadas en su casa, allá en la carrera 6ª con calle
7ª, esquinera para más señas.
Baltica supo de alpargatas, de guitarra y de
poesía en sus años juveniles y nunca renunció a “tomarle el pelo a la vida” sin
importar el escenario, como embarrarse las alpargatas para pisar los montones
de monedas que colocaba su mamá Clara cuando contaba sus ganancias del sábado
en la panadería y Baltica recuperaba una que otra moneda para sus gastos.
poesía en sus años juveniles y nunca renunció a “tomarle el pelo a la vida” sin
importar el escenario, como embarrarse las alpargatas para pisar los montones
de monedas que colocaba su mamá Clara cuando contaba sus ganancias del sábado
en la panadería y Baltica recuperaba una que otra moneda para sus gastos.
La chispa, la jocosidad, la picaresca, que
fluía en la vida de Baltazar fueron los mejores ingredientes para disfrutar la
vida a plenitud con su familia y con sus amigos. Cada año era invitado a
elaborar el “famoso testamento” de año viejo que se ofrecía a toda Sandoná en
cita del 31 de diciembre de todos los años y en algún lugar secreto se
reunían 6 o 7 líderes en esas especialidades como el ”vida mugre” Aurelio Cabrera, Gerardo Arcos, Gerardo
Cabrera, Marcial Sánchez, Edgar Meza y Saulo Ojeda.
fluía en la vida de Baltazar fueron los mejores ingredientes para disfrutar la
vida a plenitud con su familia y con sus amigos. Cada año era invitado a
elaborar el “famoso testamento” de año viejo que se ofrecía a toda Sandoná en
cita del 31 de diciembre de todos los años y en algún lugar secreto se
reunían 6 o 7 líderes en esas especialidades como el ”vida mugre” Aurelio Cabrera, Gerardo Arcos, Gerardo
Cabrera, Marcial Sánchez, Edgar Meza y Saulo Ojeda.
“Toda una vida”, “Bésame mucho”, “Dos almas”,
“Solamente una vez”, “Alma corazón y vida”, “Nosotros” y no podía faltar el muy
nuestro “Chambú”, eran las canciones de su repertorio musical cargado de
sentimiento, romance y nostalgia cantados con sus amigos Alberto Hidalgo y
Libardo Guzmán. Amigo de la música que
más sacudía su sentimiento cuando su sobrino, el “Pote” Mideros, visitaba a
Sandoná para alegrar todos los diciembres, haciendo el ambiente fiestero que
siempre ha caracterizado a nuestro pueblo y le ha convertido en la cuna de
músicos de ya muchas generaciones y de inmensa valía en el concierto
colombiano.
“Solamente una vez”, “Alma corazón y vida”, “Nosotros” y no podía faltar el muy
nuestro “Chambú”, eran las canciones de su repertorio musical cargado de
sentimiento, romance y nostalgia cantados con sus amigos Alberto Hidalgo y
Libardo Guzmán. Amigo de la música que
más sacudía su sentimiento cuando su sobrino, el “Pote” Mideros, visitaba a
Sandoná para alegrar todos los diciembres, haciendo el ambiente fiestero que
siempre ha caracterizado a nuestro pueblo y le ha convertido en la cuna de
músicos de ya muchas generaciones y de inmensa valía en el concierto
colombiano.
Su habilidad y creatividad, sus trabajos
siempre ponderados, al igual que su alegre y cordial disposición, lo llevaron a
ganarse la confianza de todos sus paisanos del pueblo y del campo, al punto
que, con tan numerosa familia de trece hijos….nueve varones y 4 mujeres, tuvo excelentes ayudantes
para atender estos requerimientos que a diario llegaban….Ah! y la
generosidad de los guaicosos hizo que desde las fincas llegaran las naranjas,
los plátanos, la yuca, los huevos, las gallinas, las papas pastusa y criollas;
de los trapiches: la panela, las melcochas
y hasta el guarapo. Por eso vale recordar a personas tan especiales para
los Mideros Rosero como Epaminondas Caicedo, Carlos Rodríguez, Manuel Romo,
Misael Meza y a los amigos Castillo vecinos de Consacá que siempre, siempre
llegaban a la casa cargados de costales y canastos llenos de sus frutos de esa
tierra fértil de sus fincas, con estas expresiones de cariño hacia una familia
que solo les entregó un servicio con la mejor expresión de amistad
siempre ponderados, al igual que su alegre y cordial disposición, lo llevaron a
ganarse la confianza de todos sus paisanos del pueblo y del campo, al punto
que, con tan numerosa familia de trece hijos….nueve varones y 4 mujeres, tuvo excelentes ayudantes
para atender estos requerimientos que a diario llegaban….Ah! y la
generosidad de los guaicosos hizo que desde las fincas llegaran las naranjas,
los plátanos, la yuca, los huevos, las gallinas, las papas pastusa y criollas;
de los trapiches: la panela, las melcochas
y hasta el guarapo. Por eso vale recordar a personas tan especiales para
los Mideros Rosero como Epaminondas Caicedo, Carlos Rodríguez, Manuel Romo,
Misael Meza y a los amigos Castillo vecinos de Consacá que siempre, siempre
llegaban a la casa cargados de costales y canastos llenos de sus frutos de esa
tierra fértil de sus fincas, con estas expresiones de cariño hacia una familia
que solo les entregó un servicio con la mejor expresión de amistad
Fue un extraordinario padre que supo asumir su
responsabilidad, ante esos 13 hijos con rectitud, con disciplina, con compromiso,
con carácter y ante todo con amor y alegría; ingredientes que siempre estaban
presentes en todos sus días, desde las 5 de la mañana que comenzaba su labor
despertando a su batallón con el pasillo “”Esperanza”, del dueto
colomboecuatoriano Ibarra y Medina, que se escuchaba como himno al trabajo en
las ondas de Radio Santafé y que Baltazar escuchaba con fidelidad. Esa canción,
ha sido premonitoria de lo que, a la familia Mideros Rosero, les esperaba en el
horizonte caldense. Como los soñaron, como lo creyeron, como lo talló toda la
familia, se trasladó a Manizales en 1.972 y desde entonces los éxitos no han
parado de llegar, tras duras y cálidas jornadas en la mecánica industrial
desempeñada como excepcionales técnicos. Baltazar muere un 19 de Julio de 1.982,
rodeado del amor y cariño de la ya formada prole.
responsabilidad, ante esos 13 hijos con rectitud, con disciplina, con compromiso,
con carácter y ante todo con amor y alegría; ingredientes que siempre estaban
presentes en todos sus días, desde las 5 de la mañana que comenzaba su labor
despertando a su batallón con el pasillo “”Esperanza”, del dueto
colomboecuatoriano Ibarra y Medina, que se escuchaba como himno al trabajo en
las ondas de Radio Santafé y que Baltazar escuchaba con fidelidad. Esa canción,
ha sido premonitoria de lo que, a la familia Mideros Rosero, les esperaba en el
horizonte caldense. Como los soñaron, como lo creyeron, como lo talló toda la
familia, se trasladó a Manizales en 1.972 y desde entonces los éxitos no han
parado de llegar, tras duras y cálidas jornadas en la mecánica industrial
desempeñada como excepcionales técnicos. Baltazar muere un 19 de Julio de 1.982,
rodeado del amor y cariño de la ya formada prole.
De su familia viven: Sus hermanos Hernando y
Edmundo Benavides Mideros hijos de Rosario cada uno con sus familias en
Manizales, Bogotá y Pasto.
Edmundo Benavides Mideros hijos de Rosario cada uno con sus familias en
Manizales, Bogotá y Pasto.
De sus hijos: Jaime, Carlos, Álvaro, Pablo,
Roberto, Ramón, Clarita, Trinidad y Rocío viven con sus familias en Manizales y
Jorge que vive con su familia en Bucaramanga. Raúl, Deyfilita y su nieto Juan
Diego, descansan en paz. Y a la fecha suman 33 nietos y 9 bisnietos.
Roberto, Ramón, Clarita, Trinidad y Rocío viven con sus familias en Manizales y
Jorge que vive con su familia en Bucaramanga. Raúl, Deyfilita y su nieto Juan
Diego, descansan en paz. Y a la fecha suman 33 nietos y 9 bisnietos.
Hace 100 años nació en Sandoná la fuente del
poema y de la vida que luego se combinó con fe y sueños, sumados y entregados a dos
generaciones de Mideros: una que ha vivido a plenitud su camino de constante e
incansable superación con amor y entrega y la generación reciente, entregada a
disfrutar de sus capacidades, aptitudes y amor para el éxito.
poema y de la vida que luego se combinó con fe y sueños, sumados y entregados a dos
generaciones de Mideros: una que ha vivido a plenitud su camino de constante e
incansable superación con amor y entrega y la generación reciente, entregada a
disfrutar de sus capacidades, aptitudes y amor para el éxito.