La señora Miriam Portilla ganó este sábado el concurso de la mejor choriza sandoneña, programada en el I Festival de este alimento típico de esta localidad, en el marco de las fiestas de verano.
En el segundo lugar se ubicó la señora Magola Burbano, en el tercero la señora Damaris Vásquez y en el cuarto la señora Olga Betancourt.
En el concurso el jurado calificador, integrado por la señora Sandra Erazo, la profesora Flor Rivera y la señora Carmen Caicedo, evaluó seis parámetros: embutido, largo, presentación del plato, sabor, preparación y grosor.
Éstas fueron las calificaciones de las integrantes del jurado en cada uno de los parámetros estipulados.
El evento permitió a los asistentes aprender sobre la elaboración de la choriza sandoneña, de parte de las concursantes, de las integrantes del jurado y de algunas señoras que llegaron a observar este festival, que por primera vez se realiza en Sandoná.
En desarrollo del concurso se cumplieron varios procesos en la elaboración de alimento típico de Sandoná, como la picada de la carne, la preparación de los aliños, la mezcla con la carne picada, el embutido, el ahumado, la preparación de los otros alimentos para acompañar a la choriza y por último el plato final.
Se enfatizó que la preparación de la choriza se realice de manera artesanal, con los ingredientes que deben ser naturales y el ahumado que debe ser, de igual manera, natural y acompañarla con agua panela de limón, utilizando los alimentos que se producen en Sandoná.
Con los presentes recordamos varios saberes de nuestros ancestros asociados a la cocina sandoneña y en especial a la preparación de la choriza, que antes se ahumaban en un garabato, encima de la hornilla tradicional.
Se recordó así mismo la utilización de la hoja de plátano ahuchado para servir los alimentos, como lo hicieron dos concursantes y la preparación del ají molido en churuma.
Los mismos términos nos permitieron recordar a nuestras madres, abuelas y demás generaciones anteriores, que desafortunadamente muy poco se usan.
Luego de la evaluación de cada plato de choriza sandoneña, las integrantes del jurado calificador compartieron los alimentos con el público presente, que nos hizo recordar como nuestros ancestros compartieron la merienda, que por lo general la servían en un canasto, elaborado en bejuco.
El I Festival de la choriza fue un ejercicio pedagógico y de memoria de buen agrado de los asistentes al evento gastronómico, en donde se pudo combinar los saberes y los sabores de la cultura sandoneña.
Acerca del nombre de “choriza sandoneña”, las entrevistadas manifestaron que así lo conocían sus antecesoras y ahora se la resignifica como un homenaje a las mujeres sandoneñas.
Entrevistas con las concursantes:
Realizamos dos transmisiones en vivo del evento cultural, con el patrocinio de Taller Juanita, Estadero los Girasoles, Emsan, Dulcenar y Cerveza Artesanal Castiza.
El concurso fue organizado por la Administración Municipal, a través de la Secretaría de Deporte, Recreación y Cultura, en el marco de las fiestas de verano de Sandoná.